Quien dice uno, suele decir dos y en el caso de Pfizer quien dice dos dice tres, ya que el laboratorio anunció sus intenciones de aplicar una tercera dosis de su vacuna contra el Covid-19. En colaboración con su sucio BioNTech, expresaron por la tarde del jueves que pedirán autorización ante las agencias reguladoras de Estados Unidos para llevar adelante su iniciativa.

Según los estudios realizados por los mencionados laboratorios, esta tercera inyección resultaría ser muy eficiente ya que incrementaría los niveles de anticuerpos desde 5 a 10 veces más contra la cepa original de Coronavirus y tendría una efectividad similar contra la variante Delta.

”Las empresas esperan publicar datos más definitivos pronto, así como en una revista revisada por pares, y planean enviar los datos a la FDA (Agencia estadounidense de Alimentos y Drogas], a la EMA (Agencia Europea de Medicamentos] y otras autoridades reguladoras en las próximas semanas”, explicó la farmacéutica en un comunicado que difundió el Washington Post.

Además, trascendió que ambas empresas se encuentran desarrollando una vacuna específica contra Delta, en la sede de BioNTech en la ciudad de Mainz (Alemania). A este paso, el ser humano promedio del siglo XXI va a experimentar una interesante cantidad de pinchazos.

 “Si bien la protección contra la enfermedad grave se mantuvo alta durante los seis meses completos, la disminución observada en la eficacia contra el COVID-19 asintomático a lo largo del tiempo y la aparición continua de variantes son factores clave que impulsan nuestra creencia de que probablemente será necesaria una tercera dosis de refuerzo para mantener los niveles más altos de protección”, agregó el comunicado.

Recordemos que la segundada dosis de la vacuna de dicho laboratorio ha demostrado traer más efectos secundarios que la primera. Entre los síntomas aparecen la fiebre, fuerte dolor de cabeza y cansancio. 

En el caso de Argentina, hasta ahora hemos gambeteado la llegada de Pfizer al país. Sin embargo, luego del escándalo y las acusaciones de Patricia Bullrich contra el ex ministro de salud Ginés González García, afirmando que este último había pedido un “retorno” a la empresa y que el presidente “no lo desconocía”, las negociaciones parecen encaminarse.

Hace solo unos días, la administración de Alberto Fernández firmó un decreto que eliminó la palabra “negligencia” de una Ley de Vacunas en relación a hipotéticos reclamos de eventuales damnificados. Esto fue visto como un guiño tanto para Pfizer como para el laboratorio Johnson & Johnson. Si bien no hay nada formal, el panorama parece ser prometedor.