Es sabido que la vida de una tortuga transita entre la tranquilidad y el paso de los años, por lo que no extraña que puedan ser centenarias, tal es el caso de Jonathan, la tortuga que estableció un récord Guinness al cumplir 190 años el pasado 12 de enero.

A pesar de que ya tenía el récord Guinness como el animal más longevo que se haya documentado en la historia de la humanidad, Jonathan obtuvo otra marca al ser reconocida como la tortuga más vieja con 190 años de vida.

Aunque los científicos estiman que nació en 1832, la primera aparición de este quelonio está registrada mediante una fotografía de cuando llegó a la Isla Santa Elena proveniente de Seychelles. Cabe destacar, que en ese momento se le calculaba que tenía 50 años de edad.

Actualmente, Jonathan es ciego y no tiene sentido del olfato, por esta razón, los veterinarios del gobierno británico de Santa Elena, lugar donde habita actualmente, se aseguran que coma sus alimentos.

“Pasta bien ahora, pero no se da cuenta de la comida, simplemente se la colocamos en el suelo. La sección de Veterinaria todavía lo alimenta a mano una vez por semana para aumentar sus calorías, vitaminas, minerales y oligoelementos, ya que es ciego y no tiene sentido del olfato”, comentó uno de sus cuidadores.

Por otro lado, reconocieron que pese a su larga existencia, Jonathan sigue disfrutando de los placeres de la vida, pues con frecuencia se le ha visto apareándose con hembras y machos.

“A pesar de su edad, Jonathan todavía mantiene su libido y los vemos frecuentemente apareándose con Emma o con Fred. A las tortugas no les importa el género”, dijo su cuidador.

Cabe destacar, que el anterior quelonio más longevo del mundo fue Tu'i Malila, una tortuga que vivió aproximadamente 188 años. Este espécimen fue un obsequio del capitán James Cook para la familia real de Tonga en 1777. Tu'i Malila permaneció con su familia hasta su fallecimiento en 1965.