Italia cortó este jueves una racha de cuatro días consecutivos con descensos en la cantidad de contagios de coronavirus, al registrar 712 muertes y 4.492 nuevos positivos de Covid-19, mientras el premier Giuseppe Conte reconoció que la pandemia generará una recesión "severa y dura",

En conferencia de prensa, el jefe de la Protección Civil, Agostino Miozzo, indicó que el país llegó a las 8.215 víctimas mortales con Covid-19 desde el 21 de febrero, al registrar 712 casos en las últimas 24 horas, un número levemente superior a los 683 informados de martes a miércoles.

En primera instancia, Miozzo había informado 662 víctimas mortales pero luego la protección civil informó de un error en el conteo de los fallecidos en la región Piamonte que elevó las muertes del día a 712.



Además, tras cuatro días de leves descensos en los nuevos contagiados, Miozzo dio a conocer que "lamentablemente se dio una nueva suba en los infectados, con 4.492", frente a los 3491 registrados entre martes y miércoles.

El número se vio robustecido por los 2.543 positivos y 387 muertos que registró la Lombardía, la región más golpeada del país que concentra casi el 60% de las víctimas totales.

A primera hora, el primer ministro italiano, Giuseppe Conte, afirmó que la pandemia del coronavirus generará una recesión "dura y severa" para su país y para toda la Unión Europea (UE).


"La recesión será dura y severa y golpeará a todo el continente europeo", advirtió Conte al explicar en el Senado italiano la batería de medidas que su gobierno tomó desde el 11 de marzo y que incluyen suspensión de clases, cierre de restaurantes y bares y restricciones para la movilidad dentro del propio territorio.

Esta semana, con la entrada en vigencia de un nuevo decreto que dispone el cierre de todas las actividades "no esenciales", los industriales italianos plantearon a través de la patronal Confindustria su preocupación por las medidas que pueden llevarlos a pérdidas de "100.000 millones de euros al mes", según el director de la institución Vincenzo Boccia.

"La difusión de la epidemia de coronavirus ha iniciado, en Italia y en Europa, una crisis sin precedentes, que está exponiendo a nuestro país a una prueba durísima", agregó el premier.

"La difusión de la epidemia de coronavirus ha iniciado, en Italia y en Europa, una crisis sin precedentes, que está exponiendo a nuestro país a una prueba durísima".

Días atrás, Conte confirmó que gran parte de las medidas adoptadas por Italia para frenar la difusión del virus serán prorrogadas luego del 3 de abril, la fecha original de su vencimiento, mientras el país espera un pico de casos para esta semana o primeros días de la próxima, según los expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Este jueves, se hizo oficial que las más de 115.000 personas que desde el inicio de las medidas el 11 de marzo violaron las restricciones deberán pagar una multa de 200 euros, y que de ahora en adelante no habrá sanciones penales sino que solo se aplicarán procedimientos administrativos con pagos de entre 400 y 3000 euros.

España: los contagios se aceleran y los fallecidos superan la barrera de las 4.000 personas

Los contagios por coronavirus siguen subiendo en España de forma acelerada, con más de 8.500 nuevos casos en un solo día, lo que elevó este jueves el total de infectados a más de 56.000, mientras se produjeron 655 nuevas muertes, superando así la barrera de las 4.000 víctimas fatales.

La cifra de nuevos contagiados, concretamente 8.578, es la más alta desde que comenzó la pandemia, y en cambio el número de fallecidos, 655, supone un descenso respecto al día anterior, cuando se registraron 738.

Por otro lado, del total de personas contagiadas, 31.912 se encuentran hospitalizadas, y entre ellas 3.679 en la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos), según el último balance del Ministerio de Sanidad español.

Asimismo, 7.015 personas ya se curaron, el 12,5% del total, destacó el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias de España, Fernando Simón, durante la videoconferencia diaria del comité de crisis.


El incremento de los contagios fue de 18% respecto a la jornada previa, mientras la cifra de víctimas fatales supone un aumento del 19%.

En este escenario crítico, el Parlamento español validó entrada la madrugada el decreto gubernamental para extender hasta el 11 de abril el estado de alarma que mantiene a la población bajo un confinamiento casi total desde el 14 de marzo último.

El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, defendió personalmente la medida de excepción que, según aseguró, es un "sacrificio necesario para ganar tiempo".

Simón explicó que pese a que los contagios siguen creciendo, "la tendencia se va ralentizando", de ahí que las medidas adoptadas están teniendo un "impacto sustancial".



“Nos podríamos estar acercando al número máximo de casos notificados, lo que coloquialmente llamamos el pico de la curva”, aseguró por su parte el ministro de Sanidad, Salvador Illia, durante una comparecencia en el Congreso de los Diputados, reiterando las expectativas de las autoridades.

En ese sentido, el responsable sanitario indicó que España "está iniciando una fase de estabilización", ya que el incremento medio diario de casos notificados entre el 28 de febrero y el 16 de marzo fue de alrededor del 40%, mientras que en el periodo siguiente, del 17 al 24 de marzo, fue de alrededor del 20%.

El gobierno español insiste en defender el confinamiento en las condiciones actuales, es decir, permitiendo a los ciudadanos salir a la calles para acudir al supermercado, farmacias y trabajar, siempre que se respeten las medidas de distanciamiento social.

Sin embargo, son cada vez más las voces críticas que demandan un endurecimiento de las medidas y se sumaron al reclamo del presidente catalán, Quim Torra, de pedir un aislamiento total previendo un escenario muy similar al de Italia, y que apuntan a que el pico de contagios llegará recién a finales de abril.


El otro foco de cuestionamiento a la gestión del gobierno está en torno a los test rápidos de Covid-19 que se empezaron a sumar recientemente a la prueba estándar de PCR, que en España se realizan a una razón entre 15.000 y 20.000 al día.

Las autoridades españoles anunciaron recientemente la adquisición de cerca 5 millones de estos test en China, pero hoy se vieron envueltas en un escándalo después de que la prensa local reveló que al menos las pruebas que llegaron en los primeros lotes no funcionaban, al presentar una sensibilidad del 30% cuando debía ser del 80%.

Además, la Embajada de China en España afirmó a través de su cuenta de Twitter que la empresa Shenzhen Bioeasy Biotechnology, a la que según algunos medios, el gobierno compró estos test rápidos, "no ha conseguido todavía la licencia oficial de la Administración Nacional de Productos Médicos de China para vender sus productos".

En pleno revuelo, los responsables del Ministerio de Sanidad español admitieron que 9.000 test rápidos comprados a China eran imperfectos y que por ese motivo fueron "devueltos".

“Nos podríamos estar acercando al número máximo de casos notificados, lo que coloquialmente llamamos el pico de la curva”.

"Sánchez debe explicar por qué el gobierno no ha validado los test que ha comprado y que no funcionan, y si se han adquirido a una empresa sin licencia, como dice China. Si es cierto, estamos ante una auténtica irresponsabilidad que debe tener consecuencias", advirtió el líder del opositor Partido Popular (PP), Pablo Casado.

La realización de test de manera amplia y en una etapa temprana de la pandemia en Alemania parece haber sido la clave para la relativamente baja tasa de mortalidad por coronavirus en ese país, pese al alto número de contagios, según las autoridades sanitarias del país europeo.

Sánchez participa este jueves por videoconferencia de una reunión del G-20, y después de una cumbre con los líderes de la Unión Europea (UE), centrada en las diferencias que surgieron en el bloque en torno a la respuesta económica para mitigar la pandemia, y que servirá para intercambiar también información desde el punto de vista de la crisis sanitaria.

Por otro lado, el rey Felipe VI visitó esta mañana el hospital de emergencia instalado en el reciento ferial Ifema de Madrid, ante el desbordamiento de los hospitales de la capital, donde se produjo el mayor número de fallecidos.

Además, la vicepresidenta primera del gobierno, Carmen Calvo, recibió hoy el alta médica para seguir tratamiento domiciliario, tras permanecer desde el domingo último hospitalizada por una infección respiratoria, que ayer se comprobó en un segundo test que era Covid-19.

Casi 1.700 muertos y más de 29.000 contagiados por el coronavirus en Francia

Francia anunció que 1.696 personas murieron este jueves en todo el país por el coronavirus, 365 más que en la jornada anterior, mientras que la cifra de contagiados asciende a 29.155, con 3.922 nuevos casos.

El director general de la Salud francés, Jérôme Salomon, detalló que entre las víctimas mortales registradas en las últimas 24 horas hay una adolescente de 16 años de la región de Ile-de France, informó el diario Le Figaro.

Salomon precisó que, del total de 29.155 casos de Covid-19, hay 13.904 personas hospitalizadas, de las cuales 3.375 están en cuidados intensivos.


Y que 4.948 pacientes fueron recuperados tras haber padecido los efectos del virus que se originó en China a fines de diciembre y está presente en 182 países.

Asimismo, el funcionario destacó que, de los 3.375 casos graves, el 34% tiene menos de 60 años y el 58% tiene entre los 60 y 80 años.

Francia es ya el séptimo país más afectado de un balance mundial que deja ya más 500.000 casos y cerca de 23.000 muertos, de acuerdo con los cálculos de la Universidad Johns Hopkins.