El avance de la pandemia del Covid-19 significó un duró golpe para la humanidad, que se encuentra atravesando su tercer año en cuarentena -pese a las lógicas aperturas del caso-. En este sentido, varios son los países que estudian nuevas formas de tratar los casos positivos, independientemente del surgimiento de nuevas variantes.

En España, por ejemplo, el presidente Pedro Sánchez anunció que buscará torcer el rumbo en cuanto al trato que se le da al coronavirus. ¿De qué forma? Empezar a tratar al Covid como a una "simple gripe, común y corriente".

Durante una entrevista realizada por el medio Cadena Ser, Sánchez aseguró: “Trabajamos en ello desde hace semanas. Creemos tener las condiciones para que, con precaución y poco a poco, vayamos abriendo el debate a nivel técnico y empecemos a evaluar esta enfermedad como endémica”.

Sin embargo, el mandatario no se ilusiona con hacer esto en el corto y mediano plazo. “Ahora, dada la enorme transmisibilidad del Covid, resulta un desafío muy grande cumplir estrictamente con los protocolos de vigilancia universal", señaló Amparo Larrauri, responsable del grupo de vigilancia de gripe y otros virus respiratorios de la Comisión Nacional de Emergencias al diario El País de España.

Sin embargo, Sánchez precisó que “la letalidad no es la que tuvimos en la primera ola, cuando fue un 13%, y hoy es del 1%”.

Cómo planea ejecutar su plan en España contra el Covid

¿En qué consiste lo planteado por Pedro Sánchez? En un principio el cambio anunciado por el presidente Pedro Sánchez propone abandonar la notificación exhaustiva de contagios para pasar a una vigilancia “centinela”, tal como se aplica con la gripe.

La ministra española de Sanidad, Carolina Darias, aseguró que “lo ha planteado a ministros europeos”. Esta declaración consiste en una búsqueda de consenso entre las principales potencias del Viejo Continente, porque desde España quieren una aplicación transversal de la medida.

Por otro lado, Sanchez confirmó que España alcanzará este mes el pico de la sexta ola de la pandemia, anunció la compra de 344.000 dosis de antivirales orales de Pfizer que reducen en un 88% la posibilidad de hospitalización.

El mandatario se escogerá un grupo de médicos de primaria o centros de salud, combinados con ciertos hospitales, de manera estratégica, para que funcionen como puntos de control. Este método es el que, por años, funciona para el monitoreo de la gripe.

 El gobierno considera “insostenible” a largo plazo el monitoreo del Covid-19 como se ha hecho por los últimos dos años. De momento, ya hay cinco comunidades que empezaron la prueba piloto de este tipo de vigilancia.