El ex presidente estadounidense Donald Trump aceptó la candidatura republicana a la Casa Blanca y aseguró que será el mandatario de todos los estadounidenses y no solo de los de su partido. “Es necesario curar la división de la sociedad”, sostuvo en el acto de la noche del jueves.

La de anoche fue su primera intervención pública después de haber sido víctima de un intento de asesinato el sábado durante un mitin en Butler, en el estado de Pensilvania, y sus palabras coronaron la Convención Nacional Republicana, que el lunes había confirmado su nominación electoral y la de su compañero de fórmula, el senador por Ohio J.D. Vance.

Donald Trump (presidente en el período 2017-2021) se presentó ante la euforia y los aplausos de sus seguidores y dijo llegar con un mensaje de confianza, fuerza y esperanza: “Me presento a presidente para todo Estados Unidos, no para la mitad, porque no hay victoria ganando solo con la mitad”, afirmó.

En poco más de cuatro meses, tras las elecciones del 5 de noviembre, “los republicanos lograrán una victoria increíble y comenzarán los cuatro años más grandes de la historia del país”, apuntó al inicio de su intervención.

Donald Trump prometió "una nueva etapa" en Estados Unidos

Según Trump, empezará una nueva etapa “de seguridad, prosperidad y libertad para los ciudadanos de todas las razas, religiones, colores y credos, unidos por un destino único”.

El tono de su discurso fue más pausado, suave y contenido de lo habitual, como también el silencio de quienes escuchaban el relato de su atentado del sábado, del que el ex mandatario señaló que no se pronunciará más porque es “demasiado doloroso” para él.

Trump afirmó que si no hubiera girado la cabeza cuando le dispararon el pasado sábado, estaría muerto: “La bala del asesino estuvo a un cuarto de pulgada de quitarme la vida”, dijo en su primer discurso tras lo sucedido.

”Si no hubiera movido la cabeza, la bala del asesino habría entrado perfectamente y yo no estaría aquí esta noche, no estaríamos juntos”, aseveró el ya candidato a la presidencia estadounidense, en un emotivo relato.

En su discurso, que cerró la Convención Nacional Republicana, estuvo muy presente Corey Comperatore, el bombero que falleció por los disparos de un joven de 20 años que fue abatido por las fuerzas de seguridad.

Trump recordó que comenzó a hablar en ese mitin y para poder ver un gráfico en una pantalla se giró a la derecha, cuando escuchó “un fuerte sonido". "Me dije a mí mismo guau, ¿qué ha pasado? Sólo puede ser una bala y al mover mi mano derecha hacia mi oreja se cubrió de sangre. ”Había sangre por todos lados, pero me sentía muy seguro porque tenía a Dios de mi lado”, dijo.