El argentino de 28 años acusado de dañar la ciudadela inca de Machu Picchu deberá permanecer en la provincia peruana de Urubamba hasta que se resuelva su situación procesal y pagar una caución, pero los otros dos coterráneos involucrados en el incidente fueron expulsados este miércoles del país y viajan por tierra a Argentina, según fuentes diplomáticas.

"Dos de los chicos ya han sido deportados y van por tierra rumbo a Chile", dijo un vocero de la Embajada argentina en Perú.

Respecto de Nahuel Gómez, identificado como el autor principal de los daños a las ruinas en la noche del último sábado, el juzgado de instrucción de Machu Picchu dispuso su comparecencia cada 10 días y el pago de una caución juratoria de 3.000 soles (54.133 pesos argentinos) que deberá hacer efectiva este viernes 17 de enero, informó la agencia de estatal de noticias Andina.


El tribunal así lo resolvió dando lugar a la denuncia interpuesta por el Ministerio Público y la Dirección de Cultura de Cusco por considerar que "existen elementos de convicción de la comisión del delito contra los bienes culturales, en la modalidad de extracción ilegal".

Ese delito está tipificado en el artículo 228 del Código Procesal Penal, que prevé una pena de entre tres y de ocho años de prisión, más una multa de "ciento ochenta a trescientos sesenta y cinco días-multa".

"El juez dictaminó que Gómez sea liberado, pero con comparecencia restringida hasta que pague una indemnización por los daños y según su abogado el proceso durará no más de tres semanas", agregó la fuente diplomática.

Gómez y otros cinco turistas extranjeros fueron detenidos el domingo por la mañana tras ser acusados de provocar la caída y ruptura de un elemento lítico en la zona denominada "Templo del Sol" y de haber defecado en una zona adyacente.

La fiscalía formuló la acusación después de una audiencia de varias horas desarrollada en la tarde de ayer durante la cual el visitante no aceptó su responsabilidad y su abogado apeló la medida.

Los otros cinco turistas detenidos junto a Gómez -dos de ellos argentinos- habían sido trasladados inicialmente a Cusco para verificar su situación migratoria y realizarles un "procedimiento administrativo", tras lo cual la autoridad migratoria dispuso su inmediata expulsión, confirmó el general Víctor Patiño, jefe de la VII Macro Región Policial Cusco de la Policía Nacional del Perú (PNP).

Se trata de los argentinos Magdalena Abril Retamal, de 20 años, y Leandro Sactiva (32), el chileno Favian Eduardo Vera Vergara (30), la francesa Marion Lucie Martinez (26) y el brasileño Cristiano da Silva Ribiero (30).

Machu Picchu es el principal destino turístico del país y cada día es visitado por miles de viajeros, que acceden al lugar por tren desde la ciudad del Cusco, situada a 1.165 kilómetros al sureste de Lima.