Bolsonaro fue acusado de querer ingresar ilegalmente casi 3 millones de euros en joyas a Brasil
Según consignaron distintos medios del país vecino, el ex presidente brasileño recibió las joyas como un regalo de autoridades de Arabia Saudita. El problema se ocasionó porque no las declaró al volver a su patria.
Jair Bolsonaro, ex presidente de Brasil, trató de ingresar a su país joyas regaladas por Arabia Saudita con un valor de 16,5 millones de reales (casi 3 millones de euros) sin haberlas declarado previamente y sin pagar los impuestos correspondientes, según informaron en las últimas horas medios de comunicación locales.
Según se informó, el ex jefe de Estado había recibidio en octubre de 2021 una gran cantidad de joyas por parte de las autoridades sauditas, entre las que destacan "un collar, un anillo, un reloj y un par de pendientes de diamantes", todos regalos para quien era en ese momento la primera dama, Michelle Bolsonaro.
Al volver a Brasil, los agentes de aduanas encontraron los presentes en la mochila de uno de los militares que viajaron con la comitiva presidencial y comprobaron que ninguno de los objetos había sido declarado previamente como marca la ley.
Los bienes fueron incautados en el aeropuerto internacional de Guarulhos, en San Pablo, de acuerdo con la información publicada por el diario O Estado de São Paulo que luego fue confirmada por otros medios de comunicación.
El ex ministro de Minas y Energía, Bento Albuquerque, trató de recuperar las joyas sin éxito en numerosas ocasiones. El mismo medio brasileño afirmó que en los dos últimos meses del mandato de Bolsonaro se hicieron cuatro intentos de tener nuevamente los regalos movilizando incluso a los ministerios de Exteriores y Economía, todos sin éxito.
Una forma de recuperar las joyas sería pagando el impuesto obligatorio por su importación, un 50 por ciento del valor del bien en cuestión, y una multa del 25 por ciento del valor por no haberse declarado desde el principio.
Otra opción sería declararlas como "regalo oficial al presidente de la República y la primera dama", pero medios locales explican que de esta forma pertenecerían al Estado de Brasil, no a los Bolsonaro.
El actual ministro de la Secretaría de Comunicación de la Presidencia, Paulo Pimenta, se pronunció duramente sobre el tema en su cuenta de Twitter: "El reportaje de (O Estado de São Paulo) revela detalles espantosos sobre cómo funcionaba el esquema de sobornos, regalos y ventajas ilegales de Bolsonaro, sus familiares y asesores cercanos. Todos merecen ser investigados y sancionados por los delitos cometidos".