Asesinó a golpes su hijita de 2 años y le echó la culpa al perro: la autopsia arrojó un dato estremecedor
El brutal crimen tuvo lugar el 21 de julio en 2020 en uan vivienda de la ciudad galesa de Pembrokeshire, en tanto, por el hecho la madre y el padrastro estpna siendo juzgados.
El horror de un infanticidio no tiene justificación posible en cualquier parte del mundo, y un caso que conmociona todavía a Gales se encuentra actuamente en su juicio de castigo para los sospechos del crimen de una niña de dos años, quien sufrió 101 lesiones cuando fue asesinada por su padrastro, que después alegó que el perro de la familia la empujó por las escaleras, según testificó ante el tribunal.
Lola James tuvo una lesión cerebral catastrófica después de ser atacada por el novio de su madre, de 31 años, en su casa de Pembrokeshire. En tanto, el sujeto está detenido, imputado por el crimen.
La madre, Sinead James, de 30 años, declaró a la policía que estaba durmiendo cuando Lola sufrió una serie de horribles lesiones, y afirmó no tener motivos para pensar que Bevan fuera a hacerle daño. Lo cierto, es que la mujer también está acusada de causar o permitir su muerte.
Según el tribunal, James no protegió a su hija cuando permitió que Bevan se instalara en su casa. Lola murió sólo cuatro meses después de que él se mudara a causa de un "ataque frenético y extremadamente violento".
Cabe destacar, que los médicos del Hospital Universitario de Gales, en Cardiff, detectaron 101 lesiones superficiales en Lola, entre ellas "hematomas por todo su cuerpito y quemaduras en la piel".
También sufrió daños importantes en todas las retinas, así como una lesión cerebral catastrófica, y murió cuatro días después (el 21 de julio de 2020), con sólo dos años y nueve meses de edad.
Infanticidio: juicio en marcha
La fiscal Caroline Rees KC dijo que Bevan buscó información en Internet sobre "bebés que sufrieron impactos en la cabeza y pérdida de conciencia" la mañana del presunto ataque, el 17 de julio de 2020.
También tomó fotos y un video de la cabeza hinchada de Lola después de sus lesiones. Pero el juicio escuchó que esperó casi una hora antes de dar la alarma en la casa de la familia en Haverfordwest, Pembrokeshire.
El Tribunal de la Corona de Swansea escuchó que la madre James sabía que su novio tenía "un carácter desagradable y violento", pero optó por "dar prioridad a su relación con él por encima de la seguridad física de su propia hija".
Rees dijo: "Decimos que aunque Kyle Bevan no era el padre de Lola biológicamente, ella debería haber sido capaz de confiar en él como un adulto en su casa para no causarle ningún daño".
"Decimos que abusó gravemente de esa confianza. También decimos que Lola debería haber podido confiar en su propia madre para mantenerla a salvo de daños y riesgos físicos".
Sinead James, según la acusación, incumplió gravemente su deber para con su hija. El tribunal escuchó Bevan llevó a cabo búsquedas en Internet a las 6.32 am antes de que esperó hasta las 7.28 am para decirle a su madre Alison Bevan para llamar a una ambulancia.
¿Coartada caída?
"La Fiscalía dice que Kyle Bevan necesitaba esa hora para inventar mentiras para protegerse a sí mismo y para inventar una excusa de cómo este pequeño niño había pasado de estar vivo y bien a estar en un estado tan peligroso mientras ella estaba sola con él. Necesitaba tiempo para cubrir sus huellas. Cuando llegaron los paramédicos se encontraron con que Lola había sido vestida pero estaba mojada y que Lola estaba gravemente herida", dijo la justicia.
"Estaba inconsciente, aunque aún respiraba, y tenía la cabeza y la cara hinchadas. Se observaron hematomas en la frente de Lola. Kyle Bevan continuó tratando de explicar las cosas culpando al perro de la familia por empujar a Lola escaleras abajo. La fiscalía dice que fue una mentira deliberada para encubrir su culpabilidad", agregó.