Las fiestas fueron especiales en todo el mundo por la pandemia del coronavirus, ya que los aislamientos de en los diferentes países hicieron que las mesas, no están completas como siempre.

Pero sin lugar a dudas, una de las peores navidades se vivió en Bélgica, en donde un hombre visitó a un geriátrico vestido de Papá Noel, contagió a unas 150 personas, de las cuales 18 fallecieron.

Según expresan medios locales, el asilo cuenta con 120 residentes y unos 36 empleados infectados por Covid-19, por el hijo de uno de los abuelos vestido de Santa Claus.

Esta esperluznante historia ocurrida en la localidad de Mol, recorrió el mundo, ya que una acción irresponsable de un joven causó una verdadera catástrofe.

Por lo relatado por personal del hogar Hemelrijck, después de la fiesta y la visita de Santa, el hombre que ilusionó a los adultos mayores comenzó a sentirse mal y le hicieron un hisopado que dio positivo.

Y fue ese el enlace para los 45 infectados, que fueron creciendo día a día y la preocupación fue mayor cuando varios de los ancianos empezaron a presentar síntomas fuertes.

Este tipo de encuentros están prohibidos y la empresa que dirige el geriátrico habría saltado las normas al permitir la entrada del hijo de un residente y su contacto con los abuelos.

Bélgica atraviesa la segunda ola de contagios y anunció que comenzará con la campaña de vacunación contra el coronavirus el próximo 5 de enero.

Jannes Verheyen, vocero de Armonea que es la empresa que gestiona el geriátrico, señaló que "no tiene sentido condenar a la gente. El equipo está muy conmocionado por lo que sucedió, pero eso también los motiva mucho para sacar el virus nuevamente". 

"Si hubieran solicitado permiso, habríamos dado una respuesta negativa", aseguró Wim Caeyers.

Bélgica ya suma 19.158 fallecidos desde el inicio de la pandemia y ayer confirmó que cuenta con casos positivos de la nueva cepa de Covid-19, lo que encendió las alarmas.