Un exitoso empresario de Las Vegas, Nevada, en Estados Unidos, está dispuesto a entregar cerca de un millón de dólares a tres personas que puedan responder una sola pregunta. Aunque no es tan fácil como parece y hay hay ciertos requisitos que se deben cumplir.

Robert Bigelow, un multimillonario de 75 años que hizo su fortuna en el mercado inmobiliario, dirige un negocio hotelero y aeroespacial. Desde temprana edad, el magnate mantuvo un inquieto interés por "eventos anómalos", según indic. The New York Times.

Su fortuna le permitió financiar empresas aeroespaciales para perseguir sus intereses, como el diseño y la construcción de hábitats inflables para astronautas de la NASA. Pero también para el estudio sobre civilizaciones extraterrestres y los ovnis.

Sin embargo, en esta ocasión el aporte económico de Bigelow está relacionado con la investigación de la vida después de la muerte. En junio de 2020, fundó el Instituto Bigelow para el Estudio de la Conciencia (BICS, por sus siglas en inglés).

Su nuevo proyecto está inspirado en parte por la muerte de su esposa, Diane Mona Bigelow, quien falleció en febrero del año pasado por una enfermedad de la médula ósea y leucemia. Aunque su interés por la conciencia creció luego de que su hijo Rod Lee se suicidara en 1992. El hijo de este, su nieto, también se quitó la vida años después.

Ahora el instituto BICS lanzó un concurso para quienes puedan responder si existe la "posibilidad de supervivencia de la conciencia humana más allá de la muerte corporal". En el proceso de solicitud abierto hasta el 28 de febrero pueden participar todo tipo de investigadores serios y con experiencia.

Para los científicos formados en el campo de la neurología y la psicología es posible presentar hasta el 1 de agosto una tesis de 25.000 palabras sobre el tema. El ganador será anunciado el 1 de noviembre. El primer lugar recibirá 500.000 dólares, el segundo 300.000 y el tercero 150.000.

Bigelow dijo que tenía una idea de cuál podría ser la mejor evidencia, pero que "sería perjudicial decirlo".

El concurso es financiado por el empresario Robert Bigelow.