Una usuaria de Twitter compartió una divertida anécdota que experimentó mientras solicitaba una cita en la clínica veterinaria de su barrio para bañar a su perro. Sin embargo, la historia tomó un giro inesperado, revelando el nombre único de su compañero canino. Este tuit se volvió furor, generando risas por miles y motivando a cientos de personas a compartir sus propias experiencias relacionadas con sus queridas mascotas.

A pesar del crecimiento significativo de otras aplicaciones de redes sociales, la plataforma de Twitter sigue siendo un fenómeno mundial. La inmediatez y la concisión de los tuits han permitido que miles de personas alcancen una amplia audiencia con sus fascinantes anécdotas. Aunque todos cometemos errores y confusiones en esta plataforma, algunos de ellos provocan risas y diversión.

De igual manera, es innegable que entre los contenidos más queridos por los usuarios de Internet se encuentran los bebés y los animales. Estos encantadores protagonistas suscitan una amplia gama de emociones debido a su inocencia y sinceridad. Sin embargo, en esta historia en particular, no solo inspiraron ternura, sino que también desencadenaron una sorprendente conversación acerca de nombres para mascotas.

Un perrito con un divertido nombre 

Todo comenzó cuando la usuaria, Valentina Ortiz (@ValentinaOrti47), compartió bajo el título "Este día tenía que llegar" una serie de capturas de pantalla de un chat que sostuvo con la secretaria de la clínica veterinaria. En la conversación, Valentina se presentó y solicitó una cita para el baño y el corte de su perro. Después de confirmar la hora del servicio, la empleada del lugar le pidió el nombre de su mascota, a partir de ese punto, el diálogo se tornó un tanto peculiar.

"¿Cómo se llama la mascota?", preguntaron desde el comercio de salud y la dueña respondió "Se llama Quién". Al no comprender la respuesta, volvió a indagar "¿La mascota como se llama?, para agendar" y muy segura la chica le contesto "Mi mascota se llama Quién". 

Desde la veterinaria pensaron que les estaban "tomando el pelo" y con poca paciencia le comentaron "Valentina estás solicitando servicio de peluquería para un perro. Te damos agenda para mañana a las 3 pm, nos dices que perfecto y para poder separar la cita necesitamos saber el nombre del perro" y sostuvo el empleado "Esperamos habernos hecho entender". Cansada de la situación, la usuaria de Twitter le aseguró a la recepcionista "Creo entonces que son ustedes los que no me entienden" y explicó "Mi perro se llama 'Quién', sé que es un nombre extraño, pero se llama Quien".