Actualmente, existen distintos sitios web que permiten a los usuarios dejar sus opiniones sobre los restaurantes que visitaron. Los comentarios suelen ser útiles como para tener una idea general respecto de un lugar desconocido, sin embargo, hay que considerar que las devoluciones no son concluyentes y muchas veces se basan en experiencias personales muy puntuales.

Un claro ejemplo de esto fue el comentario de una mujer que estuvo de paso por un local gastronómico, pero decidió no quedarse porque no había Wifi y luego se atrevió a puntuar una supuesta experiencia.

A través de las reseñas de Google, la mujer puntuó con dos estrellas a un restaurante, bajando de esta manera la reputación del mismo en Google y dándole mala fama frente a posibles nuevos comensales. Su justificación por tan bajo puntaje fue que no contaban con conexión a Internet.

“No tiene Wifi”, comentó la mujer y bajo su comentario se puede ver el descargo que escribió el dueño del restaurante.

“Me acuerdo de usted perfectamente señora, se acercó a preguntar si teníamos Wifi. Le dijimos que no y se marchó sin siquiera probar ninguno de nuestros productos diciendo que se pasaría a comer más tarde, a lo que respondimos educadamente que la esperábamos a usted y su familia encantados”, comenzó diciendo el encargado de respoder a las reseñas que dejan los clientes en Internet.

Luego, denunció que la mujer jamás había probado un plato del local: “Nunca vino. Aun así, tiene los santísimos cojones de puntuarnos con dos estrellas sin siquiera haber probado nuestra comida. No habla ni de nuestro producto (por el cual hemos recibido un certificado de excelencia), ni de la atención recibida, ni de la comodidad (o no) del establecimiento. Su único argumento es ‘No tiene wifi’. No, no tenemos ‘wifi’, somos una pizzería, no un locutorio”.

“No es usted más imbécil porque no se entrena dos veces a la semana. Si Google permitiera puntuar a gente como usted, también le daría dos estrellas, no por no tener Wifi, sino por no tener cerebro”, cerró enojado y con tono violento.

Tras viralizarse el mensaje, fueron miles las reacciones de los usuarios que cuestionaron la crítica injustificada del cliente y tiraron flores a la respuesta del responsable del comercio.