Un mujer se llevó el susto de su vida en el momento en el que decidió hacerse una ecografía para ver la imagen de su bebé.

La joven de 36 años, oriunda de Inglaterra, embarazada de 7 meses quiso controlar que todo transcurría con normalidad tras haber sufrido tres abortos espontáneos, además de haber superado un cáncer cuando tenía sólo 18 años y tuvieron que extirparle un pulmón.

Emocionada por la situación que estaba viviendo, decidió compartir la imagen del monitor del ultrasonido en las redes sociales y no paró de recibir tenebrosos mensajes.

"Estaba mirando al bebé, no el resto del escaneo", detalló Hannah Hodgson, la madre que ahora no sale del asombro cada vez que revisa la ecografía.

"Puse una actualización de mi estado y la gente empezó a comentar. No me había dado cuenta de lo que se había proyectado", detalló.

La mujer aseguró que junto con su pareja se tomaron todo con humor, lo que no les impidió disfrutar al máximo de los preparativos por la llegada de Ollie.

Por último, contó que a través de Twitter un internauta le dijo que en la eco apareció Honey Monster Puffs, un simpático monstruo ícono de una marca de cereales.

La ecografía que fue viral esconde algo espeluznante.