Un polémico ticket con "recargo" en un restaurante armó una fuerte polémica en Twitter, donde los usuarios expresaron su postura sobre la "recomendación" de una propina para el mozo. Todo sucedió en un bar de Barcelona y la modalidad recordó a lo que se aplica en otros países, donde es obligatorio dejar un "tip". 

En España hace un tiempo que se está hablando de la aplicación de una propina obligatoria y un tuitero mostró desde su perfil el primer ticket que le llegó con ese sistema.

En el caso del tuit viral, se puede observar a simple vista que se incluye un concepto que no suele ser habitual en España: un segundo precio total que incluye la propina del 10%.

Según muestra el autor de la publicación, 2 “croissants” y los cafés cuestan unos 9,14 euros, pero si le sumamos la propina alcanza los 10,05. Luego del posteo ha suscitado un intenso debate en la red social del pajarito azul sobre esta práctica que parece que poco a poco se quiere ir instaurando en España. 

"Pues esto parece que viene para quedarse, y una cosa voy a decir. El primer ticket que veas venir así le voy a decir que llame al jefe. Y cuando venga le diré: Te voy a dar una p*lla", describe el autor del tuit.

En pocas horas, este posteo se hizo viral y sumó 320.000 reproducciones y casi 3.000 “Me Gusta”. Además, cuenta, entre citas y repuestas, más de 1.000 comentarios.

“No te obligan, te lo recomiendan… como si te recomiendan carne y pides pescado...no veo el problema”, “se pide la hoja de reclamaciones sistemáticamente y ya verás cómo se les quita rapidito la costumbre”, y “¿tuviste que pagar la propina obligatoriamente? Es que no lo veo claro. A mí no me dan propina por mi trabajo”, son algunos ejemplos de ellos.

Otra usuaria castigó: "La propina es algo voluntario y en la cantidad que al que quiera darla, le parezca bien. Yo tengo claro que allá dónde la exijan o recomienden, se queda sin ella"

Por otra parte, según detalló Huffingtonpost, el secretario general de la organización de consumidores Facua, Rubén Sánchez, criticó la técnica porque trata de "crear un sentimiento de culpa" en el cliente que no suele dejar propina.

Del mismo modo, Sánchez comentó entonces que "no es un acto ilegal porque no lo imponen", pero cree que pedir ese dinero es "intentar aprovecharse" del cliente.

Además, señaló que con ese recargo buscan que "de alguna manera, se convierta en el que paga el plus de un salario demasiado reducido" del personal de los locales de gastronomía. Según completó, la propina "no puede ser el sustituto de un salario decente".