La torta chajá es un verdadero tesoro culinario de Uruguay, un postre dulce y fresco, perfecto para acompañar celebraciones en verano y primavera, pero con ingredientes que se consiguen fácilmente todo el año. 

Entre las opciones de postres para preparar en Año Nuevo, predominan las prepararaciones frescas y frutales, como la ensalada de frutas o las copas heladas, para contrarrestar con los clásicos de la mesa dulce como el postre de maní, las confituras y los panificados.

Esta creación data del año 1927 en una clásica confitería de Paysandú llamada “Las Familias”. Orlando Castellano, el pastelero que lo inventó, cuenta que el nombre del postre es una comparación entre la suavidad de sus sabores con el plumaje del ave autóctona de Uruguay, el chajá. 

Esta exquisita torta combina capas de un esponjoso bizcochuelo de vainilla, crema batida, duraznos en almíbar y un dulce y crocante toque de merengue dorado. Con algunos ingredientes, sencillos de conseguir, podés hacer esta increíble preparación y sorprender a toda la familia. 

A continuación, la receta más fácil para que la prepares en casa, en muy pocos pasos, y una serie de consejos para que te salga perfecta en el primer intento. La podés preparar para estas fiestas o guardar la receta para el próximo cumpleaños. 

Torta chajá, un postre suave, fresco y delicado perfecto para disfrutar en climas calurosos.

Cómo preparar la clásica torta chajá

Ingredientes para la torta:

6 huevos

180 g de azúcar

180 g de harina 0000

1 cucharadita de esencia de vainilla

Para el relleno y la decoración:

500 ml de crema de leche

100 g de azúcar impalpable

500 g de dulce de leche

1 lata de duraznos en almíbar (400 g)

Dos discos de merengue

Merenguitos

Procedimiento:

Batir los huevos y el azúcar hasta que estén a punto letra. Agregar la esencia de vainilla.

Tamizar la harina, agregar en tres tandas a la preparación y mezclar suavemente con movimientos envolventes hasta que no queden grumos.

Verter la masa en un molde circular y hornear a 180 °C durante 20-25 minutos. Dejar enfriar.

Batir la crema de leche con el azúcar impalpable y la esencia de vainilla hasta obtener una consistencia firme.

Armar la torta alternando capas de bizcochuelo, dulce de leche, merengue, crema y duraznos en almíbar. Humedecer cada capa de bizcochuelo con almíbar. 

Cubrir la torta con crema y decorar con merenguitos a gusto para agregar crocancia. 

Dejar enfriar en la heladera y disfrutar. 

Consejos para una torta chajá perfecta:

La clave de una torta chajá perfecta radica en la precisión al preparar cada capa. Asegurate de batir los huevos y el azúcar hasta que estén espumosos y de tamizar los ingredientes secos para evitar grumos en el bizcocho. La crema también debe ser batida a la consistencia adecuada para lograr una textura ligera y aireada en la torta.

Al almíbar para humedecer las capas de bizcochuelo podés agregarle unas cucharadas de moscato o licor para un resultado “borracho”. 

Después de armar la torta con las capas de bizcocho, crema y duraznos, dejala reposar en la heladera al menos unas horas o idealmente toda la noche. Esto permitirá que los sabores se mezclen y que la torta alcance su máximo potencial de sabor y textura.

Sentite libre de expresar tu creatividad en la decoración. Podés utilizar duraznos adicionales, trozos de merengue o incluso ralladura de limón para darle un toque personal. La presentación festiva es parte de la magia de esta torta.