Shortbread: receta del postre inglés que puso a prueba a los participantes de Bake Off 2021
El miércoles de esta semana, Damián Betular, Pamela Villar y Dolli Yrigoyen desafiaron a los participantes del certamen de pastelería a cocinar un postre inglés muy sencillo, cuya única dificultad fue la presentación en forma de torre.
Los desafíos en Bake Off 2021 se vuelven cada vez más complejos de realizar, pero los participantes del exitoso reality show de pastelería no bajan los brazos y dejan todo su corazón en cada una de sus preparaciones semanales para lograr convertirse en el pastelero/a del día.
En el episodio del pasado miércoles de esta semana, el jurado compuesto por Damián Betular, Pamela Villar y Dolli Irigoyen tuvo que elegir entre las preparaciones de los concursantes el mejor shortbread del día.
¡Emi es el pastelero del día! �� Logró ganar el desafío múltilple de #BakeOffArgentina haciendo una torre de vidriera �� ¡Mirá el momento de la definición! �� pic.twitter.com/6XafxkBn4g
— #BakeOffArgentina (@CocinaTelefe) October 7, 2021
¿Qué es son los shortbread?
Se trata de un postre originario de Escocia que se convirtió en toda una tendencia en el Viejo Continente. Para los países anglosajones son como sus “galletitas de agua”, según describió Betular al comienzo del programa. Se tratan de unas galletas dulces que llevan mucha manteca y con una contextura crujiente y quebradiza. Son irresistibles al paladar y muy comunes a la hora del afternoon tea en Inglaterra.
Un poco de historia
De acuerdo con el sitio web Directo al paladar, los shortbreads originales del siglo XVII eran conocidos como biscuit bread, dado que eran elaborados a partir de restos de masa de pan endulzados y secados al horno.
Finlamente, con el paso de los años, la levadura fue reemplazada por manteca, dando nacimiento a las galletas shortbread que se conocen hoy día. Se degustan en fechas tradicionales, como la Noche buena y la Navidad, las bodas, los bautismos, etcétera.
Su cambio se debe también a las preferencias de la antigua reina escocesa María de Estuardo, quien en el siglo XVI era aficionada a los “petticoat tails”, es decir, masas finas y crujientes aromatizadas con semillas de alcaravea.
De regreso a nuestros tiempos, si bien son de encontrarse con facilidad en muchos supermercados, también se pueden disfrutar de hacerlos caseros y combinarlos con distintos rellenos sabrosos.
Ingredientes (para 4 personas)
- Azúcar glas 110 g
- Mantequilla a temperatura ambiente 225 g
- Harina de trigo 225 g
- Maicena o harina de arroz 100 g
- Sal 2 g
Procedimiento:
- Comenzaremos precalentando el horno a 170 grados. Seguidamente tamizamos las harinas y reservamos en un bol.
- En otro recipiente mezclamos la mantequilla a temperatura ambiente, la sal y el azúcar glas, mezclamos con unas varillas hasta obtener una mezcla homogénea.
- Incorporamos las harinas y mezclamos sin amasar demasiado, lo justa hasta que no veamos grumos de harina sin incorporar. Podemos rectificar la masa si es muy seca con un poco de agua, o bien espolvorear un poco de harina si resulta muy pegajosa.
- En una mesa enharinada extendemos la masa con un rodillo hasta dejarla del grosor de un centímetro. Cortamos con un cuchillo o con cortapasas la forma deseada, y repetimos esta operación hasta acabar con la masa. Las pinchamos con un tenedor para hacerle los dibujos característicos.
- Colocamos las galletas en una placa antiadherente para horno y horneamos durante 12 minutos. Enfriamos encima de una rejilla.