Cada fin de semana emerge el mismo interrogante: ¿Hay algo rico para comer? Para calmar las ansias, existe una receta de torta matera que implica pocos pasos y que se popularizó por particular manera de prepararla, puesto que está hecha a base de 12 cucharadas.

Se trata de un bizcochuelo que sirve de acompañamiento para unos buenos "amargos" así como también para comer junto a alguna infusión fresca para combatir el calor como el famoso café frío que tanto se divulgó esta temporada veraniega. De esta forma, la torta matera de 12 cucharadas es un indispensable para comer algo rico y sin gastar mucha plata en la panadería. 

El resultado de esta preparación es una masa dulce, esponjosa y suave, mucho más rica que las compradas y bien fácil de hacer. Dentro del mar de alternativas panificadas que existen, esta receta es de las más prácticas y es tan cumplidora como las de caja, con ingredientes accesibles que se encuentran en cualquier supermercado o cocina hogareña. 

Receta de torta matera de 12 cucharadas: para acompañar el mate del "finde"

Lo mejor de esta receta es que se puede rellenar con cualquier cosa o simplemente comerla sola. Algunas personas fanáticas de la tradición nacional eligen agregarle dulce de leche en el medio o untárselo por encima, mientras que otras, decoran el bizcochuelo con azúcar impalpable por encima, al mejor estilo "menos es más". 

También se le puede sumar alguna fruta, similar a la famosa torta invertida que está hecha a base de harina, azúcar y huevo pero con el plus de sabor y frescura de la banana, manzana, pera o naranja. En fin, las opciones son infinitas, con lo cual la torta matera se puede utilizar de base y desplegar la imaginación. 

Ingredientes de la torta matera de 12 cucharadas

  • 2 huevos.
  • 12 de azúcar.
  • 12 de aceite.
  • 12 de leche.
  • Esencia de vainilla.
  • Ralladura de limón o naranja.
  • 12 cucharadas de harina leudante o harina común (con 2 cucharaditas de polvo para hornear).

Paso a paso para hacer la torta matera con solo 12 cucharadas

1) En un recipiente colocar los huevos y el azuar. Batir bien. 

2) Añadir esencia de vainilla a la mezcla, revolver un poco más e ir agregando el aceite. 

3) Agregar las cucharadas de leche y la ralladura de limón o naranja. Continuar mezclando.

4) Ahora, añadir las cucharadas de harina y revolver hasta que la mezcla se torne homogenea y suave. 

5) Colocar la mezcla en un molde enmantecado y enharinado. Por arriba esparcir el azúcar para que le quede el famoso crocante del final.

6) Llevar a horno medio precalentado durante 20-30 minutos y dejar ahí sin tocar hasta pasado ese tiempo. Si a la media hora todavía le falta, dejar 10 minutos más y retirar. ¡Listo!