Las pizzas son una de las comidas clásicas en todo lo que respecta a eventos sociales, cumpleaños infantiles y reuniones con amigos. ¿El motivo? La rapidez de su preparación, el rendimiento de cada una y que generalmente suele gustarle a todo el mundo en sus diversas variables. 

Al horno, a la piedra, a la parrilla, son algunas de las maneras de preparar esta comida típica italiana, pero adoptada casi como propia que algunas personas deciden hasta desayunarla con unos mates. 

Una de las versiones más simples para cocinarla es en una sartén antiadherente, de la misma manera que con las tradicionales, pero evitando prender el horno, para que puedas ganar más tiempo. 

Para esta receta son necesarios 150 gramos de harina, 100 mililitros de agua, una cucharada de aceite de oliva suave, cuatro gramos de levadura en polvo, cuatro cucharadas de salsa de tomate, mozzarella rallada, panceta, aceitunas negras, una cucharada de orégano y sal.

El paso a paso para esta receta

El primer paso es colocar harina, levadura y sal en un bol, luego de mezclar los ingredientes se debe hacer un hueco en el medio para colocarle agua tibia y una cucharada de aceite para mezclar nuevamente hasta conseguir una masa que se pegue en las manos.

En una base de harina, colocar la preparación y amasar hasta conseguir una masa elástica que no se te quede en las manos, luego de conseguir este punto, tapar el bollo y dejarlo reposar 10 minutos hasta que duplique su tamaño. 

Luego de este tiempo, destapar y estirar para darle forma con las manos. Con esta preparación lista, colocar aceite en una sartén antiadherente para luego colocar la masa. Con la masa colocada en la base, sumarle los ingredientes. 

Una vez terminado este paso, deberán tapar la sartén para que se concentre el calor y cocine parejo, a un fuego medio durante cinco minutos. Se recomienda que la masa no quede muy gruesa para que se cocine mucho mejor.