El asado es una de las comidas tradicionales de Argentina y un clásico que se disfruta los domingos con la familia, pero a veces no todos saben cómo prepararlo y cometen algunos errores que los comensales no perdonan, como la carne dura o la falta de sabor. Aunque también hay otros que desconocen que además de usar carbón, pueden emplear leña o madera para cocinarlo. 

Es común que cuando tenemos que prender la parrilla usemos carbón, pero alguna vez te preguntaste ¿qué pasa si uso leña o madera? No es nada del otro mundo y con este paso a paso te enseñamos a cómo prenderlo. 

1. Usar leña seca, carbón o ambos

Podés cocinar el asado utilizando leña o mezclarla con carbón si es la primera vez que vas a usarla. Hay que tener en cuenta que la primera posee la ventaja de arder mejor, esto quiere decir que el calor y la temperatura será mayor para la cocción de los alimentos. Además el sabor que tome la carne, achuras, entre otros, será muy rico. 

2. No usar alcohol

Recordá que al momento de prender la madera no tenés que usar alcohol o cualquier tipo de combustible como el kerosene, esto además de ser peligroso le dará un sabor raro a los alimentos. Tené en cuenta que la leña debe estar bien seca, es recomendable usar madera dura ya que tendrá mayor duración en el fuego y dará brasas de buena calidad. 

Podés combinar el carbón y la madera para hacer un asado.

3. Armá una pirámide

Una forma fácil para que prenda el fuego es acomodar la leña en forma de pirámide (una casita), para esto poné las piezas más chiquitas en el centro. Recordá dejar un hueco en el centro para que circule el aire y el fuego de mantenga vivo. Podés sumar unos pedazos de cartón, diario, piñas de pino secas y cáscaras de cítricos para generar un aroma rico. 

4. Prendé el fuego 

Después de que hayas armado la pirámide y tengas todo acomodado llega el momento de prender el fuego. Vas a utilizar fósforos para encender los trozos de leña o madera más pequeños. Dejamos que arda y poco a poco irá prendiendo todo. 

5. Acomodá la leña

Después de que la fogata está bien encendida hay que comenzar a acomodar la leña para ir viendo qué pedazos todavía no prendieron bien. Si usaste poca madera, podés ir sumando más y aprovechar que el fuego está fuerte. Es recomendable utilizar una vara de metal para ir ordenando todo. 

6.Poné la carne en la parrilla

Una vez que ya tengas las brasas distribuidas podés regular la altura de la parrilla, recordá que podes manejar la intensidad del calor y la tempertatura de acuerdo a cómo hayas acomodado las brasas. Podés tener dos temperaturas para la cocción, recordá que cuanto mayor sean las brasas el calor será más fuerte. Además podés controlar las llamas y evitar quemar los cortes vacunos. 

Si la llama es muy fuerte, podés mover a otra zona de la parrilla los alimentos. Recordá que antes de poner la carne podés marinarla para que realzar su sabor.