Netflix ofrecerá una suscripción "barata" que no tendrá todo el contenido: ¿Cuándo estará disponible?
Mientras sigue ideando cómo funcionará la plataforma en los próximos meses, Netflix dio algunos parámetros sobre lo que se viene para el resto del año y el venidero.
La empresa de plataforma de entretenimiento Netflix sigue compartiendo detalles sobre su nueva suscripción "barata" con publicidad, cuya existencia fue confirmada por el propio servicio apenas el pasado junio.
Durante el informe financiero correspondiente al segundo trimestre de 2022, la plataforma anunció que su objetivo es lanzar el plan con anuncios a principios del próximo año. De momento, eso sí, todavía no han fijado una fecha concreta; tampoco su precio.
Una vez más, Netflix reiteró que la suscripción con anuncios no sustituirá a ninguno de los planes disponibles actualmente. Será una propuesta completamente nueva que funcionará como la membresía de entrada al servicio. Enfocada en todas aquellas personas que, por uno u otro motivo, no quieren (o no pueden) pagar los niveles de mayor precio. Y, por otro lado, que no tienen inconvenientes en consumir publicidad mientras ven series o películas.
"Nuestra oferta de menor precio respaldada por publicidad complementará nuestros planes existentes, que permanecerán sin anuncios", recalcó Netflix. La plataforma considera que se encuentra en el momento ideal para lanzar una nueva suscripción de menor costo. Por supuesto, será opcional, por lo que los consumidores siempre tendrán la decisión final. Si no estás interesado en este plan, puedes continuar en el que ya te encuentras.
Netflix: aceptación de condiciones
Quienes se decanten por la suscripción con anuncios de Netflix, eso sí, tendrán que aceptar una limitación: no estará disponible todo el contenido de la plataforma, aunque sí la gran mayoría. La clave son los contratos que Netflix tiene cerrados con otros estudios, los cuales limitarían la distribución de sus contenidos en planes con publicidad. El contenido propio de Netflix, en cambio, no supondría ningún problema.
Con la presentación de Microsoft como su principal socio para lanzar la suscripción con anuncios, Netflix dio un paso clave para consolidar su idea. Los de Redmond, además de proporcionar la infraestructura requerida para mostrar publicidad en los contenidos, también brindarán un sistema para que Netflix pueda gestionar su relación con los anunciantes. De hecho, les promete una experiencia premium.
Suscripción con anuncios
En su reporte financiero, Netflix reportó la pérdida de 970.000 usuarios, la mayor en toda su historia. No obstante, la cifra no es tan desastrosa como se esperaba y previamente, habían estimado que 2 millones de suscriptores abandonarían el servicio durante el pasado trimestre. La cifra no solo se redujo más de la mitad, sino que además creen poder recuperarlos tan pronto como el próximo trimestre, por supuesto, del papel a la realidad existe un mundo de diferencia.
Un punto que sí tiene muy preocupado a Netflix es que su número de suscriptores en Estados Unidos y Canadá, dos mercados claves, tuvo una caída de 1,28 millones en el trimestre anterior. La buena noticia es que en otros países ganaron una cantidad significativa de usuarios y eso les permitió mitigar la pérdida en Norteamérica.
Sin duda, la cuarta temporada de Stranger Things fue una de las principales responsables de que Netflix haya superado sus propias expectativas en el segundo trimestre. Dividirla en dos tandas de episodios aseguró que una buena cantidad de suscriptores mantuviera su membresía al menos dos meses. Fue una jugada inusual para un contenido original, pero los resultados fueron positivos.
El lanzamiento de una suscripción barata con anuncios, así como el cambio de estrategia que prioriza la calidad de los contenidos en lugar de la cantidad, forman parte de la estrategia del servicio para resistir los golpes financieros.
Además, también están dedicando esfuerzos a combatir la compartición de cuentas y el martes anunciaron que varios países de Latinoamérica forman parte de una prueba donde los usuarios deben pagar una cuota adicional para cada casa donde comparten su contraseña, aunque la idea, evidentemente, no fue recibida de forma positiva.