Netflix: la impactante serie de ciencia ficción que mezcla magia y mitología y que no vas a parar hasta terminar
La producción está basada en un famoso cómic estadounidense y estrenó su primera temporada de diez capítulos. Sus distintos personajes simbolizan a dioses que le dan forma a nuestros miedos y fantasías más profundas ¡Mirá de qué se trata!
The Sandman, la flamante pieza audiovisual de una de las grandes sagas del cómic estadounidense creado por Neil Gaiman para DC, desembarcó con éxito en Netflix, mezclando magia y mitología en un cóctel que no da lugar a la decepción.
De la mano del reconocido guionista y productor, la serie tiene como protagonistas a los Eternos, un conjunto de dioses algo erráticos (Sueño, Muerte, Deseo, Destino, Desespero, Delirio y Destrucción) que vienen a vivir experiencias trascendentes a la Tierra. Cuando dormimos, hay otro mundo que nos espera llamado Dreaming o Sueño, en donde The Sandman da forma a nuestros miedos y nuestras fantasías más profundas. Dentro de la adaptación al streaming y la novela gráfica, The Sandman es la personificación de los sueños mismos y quien genera todas esas historias que suceden en la mente de los humanos al dormir. Pero Sueño es capturado por Burgess durante varias décadas y su ausencia en el mundo de los sueños desencadena una serie de eventos catastróficos, hasta que su poder onírico consigue liberarlo. Para restaurar el orden y su pérdida, Dream –Sueño– deberá viajar a través de diferentes mundos y líneas de tiempo para enmendar los errores que cometió durante años como Master of Dreams. Pero eso no es todo, sino que en el transcurso del relato, irán apareciendo otros Eternos como Corintio - Boyd Holbrook -, la anciana rejuvenecida Ethel Cripps - Joely Richardson/Niamh Walsh - y su hijo John Dee - David Thewlis -, la investigadora ocultista Johanna Constantine - Jenna Coleman -, los hermanos Caín - Sanjeev Bhaskar - y Abel - Asim Chaudhry -, Lucifer - Gwendoline Christie - o el parlanchín cuervo Matthews - Patton Oswalt -. Una producción que no escatimó en recursos fantásticos como gárgolas, explosiones, y cientos de efectos sobrenaturales, para hacer de un periodista freelance como Gaiman una verdadera estrella en el género. Según Gaiman, Sandman es “un exquisito blend entre los mitos modernos y las fantasías oscuras, donde la ficción contemporánea, el drama histórico y la leyenda antigua se entrelazan a la perfección. Y lo hace mientras visita a las personas y los lugares afectados por Morfeo, el rey de los sueños, durante sus intentos por reparar los errores cósmicos y humanos que ha cometido durante su vasta existencia”. La producción se propuso seguir de cerca la actualización de las principales luchas sociales de las últimas décadas y refleja la diversidad racial, sexual y de género en sus personajes: a lo largo del relato, numerosos protagonistas cambian sus identidades, como el bibliotecario blanco Lucien, que pasó a ser la afroamericana Lucienne; el investigador de lo paranormal John Constantine (que Keanu Reeves y Matt Ryan interpretaran, respectivamente, en el cine y las series televisivas del Arrowverse), se transformó en la demonóloga Johanna Constantine; Lucifer (el mismo personaje que Tom Ellis encarna en la serie de Netflix) abandonó su iconografía masculina para asumir una apariencia femenina, y hasta los hermanos bíblicos Caín y Abel cambiaron su etnia por la pastún pakistaní. “Me encanta vivir en una época en la que nada de lo que hice hace 35 años resulte extraño. Sandman incluyó personajes LGBTIQ+ mucho antes de que ese término existiera. Poder tener a un actor no binario como Mason Alexander Park representando a un personaje no binario como Deseo, es algo fantástico”, expresó Gaiman recientemente. Y detalló: “Estos personajes estaban inspirados en mis amigos, que yo ponía en las historietas. Quería cambiar los corazones y las mentes. Tenía amigos trans y todavía los tengo, y me parecía que nadie estaba poniendo a estas personas en los cómics”, en diálogo con The Guardian.Una serie que retoma la nueva agenda de diversidad
Reparto de The Sandman