Netflix es una de las plataformas más importantes dentro de las que brindan un servicio de streaming, por lo que constantemente están renovando el catálogo de películas y series ofreciendo a sus suscriptores una amplia variedad de categorías. 

Una de las series consideradas por la plataforma, dentro de las populares, es "Misterios sin resolver", una serie de carácter documental que cuenta con 3 volúmenes o temporadas, los dos primeros con 6 episodios cada uno mientras que el último cuenta con 9. 

“Casos reales de desapariciones estremecedoras, asesinatos escalofriantes, y encuentros paranormales inspiran el atrapante relanzamiento de esta icónica serie documental”, detalla la sinopsis de Netflix. 

En la plataforma se especifica que esta serie es un título de investigación, dentro del género docuseries debido a que trata de series sobre crímenes y documentales sobre crímenes reales.   

La atrapante miniserie basada en una tragedia real que no te dejará levantarte del sillón

Una nueva miniserie dramática de Brasil se estrenó en Netflix: está basada en una historia real y es una de las producciones que apuntan a posicionarse entre las más vistas de la plataforma en poco tiempo. 

Esta miniserie posee solamente cinco capítulos que rondan entre los 40 y 45 minutos, y está inspirada en el libro “Todo dia a mesma noite: A história não contada da boate Kiss”, que fue publicado en el año 2018 por la periodista brasileña Daniela Arbex.

“Todos los días la misma noche”, es la producción brasileña que cuenta la historia y la investigación sobre el incendio que se produjo el 27 de enero de 2013 en el boliche denominado Kiss, donde hubo 242 víctimas fatales luego que se desate un incendio en el lugar situado en la ciudad de Santa María.

Según la descripción de la historia en Netflix, “tras la muerte de 242 personas en un incendio en un club nocturno, lo único que pueden hacer los padres de las víctimas es llorar y luchar para que se haga justicia”. 

La tragedia ocurrida en Brasil ocurrió en un boliche de aquel país, el cual contaba con una sola salida y era poca espaciosa. Durante la noche, se utilizaron bengalas en su interior, el material de revestimiento del lugar era inapropiado y también hubo un hacinamiento, ya que la capacidad máxima eran para 691 y los que estaban en el lugar eran aproximadamente 1300 personas.

La tragedia dejó un saldo de 242 personas muertas y 636 heridos. Por lo que es considerado el segundo incendio de Brasil con más víctimas, solo superado por la Tragedia del Gran Circo de América del Norte, sucedida en 1961 en Niteroi, donde fallecieron 503 personas.