Con solo 14 años se fue de su casa. Vendió garrapiñada y escobas en la calle, pero luego fue tarjetero de las bailantas en donde dormía a bajo precio.
En 1991 conoció a Rodrigo Bueno y se convirtió en su presentador antes de los shows. Luego, conquistó el público en "Pasión tropical" que se emitía en Canal 9 y "Pasión de sábado" en América TV.
Durante varios años se dedicó a trabajar las 24 horas del día porque tenía miedo de quedarse sin nada. Por otro lado, hubo una época en la que Santillán consumió drogas y alcohol en exceso, pero su gran adicción siempre fue la comida.
Santillán debió atravesar situaciones difíciles incluida la pérdida de su hermano. A raíz de estas cuestiones, se le despertó una gran depresión y se quiso quitar la vida en reiteradas ocasiones. En 2011, fue diagnosticado con bipolaridad y desde ese entonces debió ser medicado.