Inspirados en Terminator, científicos crearon la piel que recubrirá a los robots del futuro
Ese órgano fue diseñado a partir de una especie de hongo llamado “Ganoderma sessile”, que forma una estructura conocida como micelio. Ese tejido será el que cubrirá la estructura robótica.
La tecnología avanza a pasos agigantados y así permite materializar inventos latentes en obras futuristas de décadas atrás, de esta manera, cada tanto hay novedades de científicos que buscan crear un auto volador, como en los cómics y películas de décadas atrás.
En este caso, la referencia inspiradora hay que buscarla en la conocida película “Terminator”, donde hay robots con apariencia humana gobernados por una Inteligencia Artificial que conlleva a distintas batallas contra las personas.
Siguiendo con lo que dejó el emblemático personaje, científicos de la Universidad del Oeste, en Reino Unido, crearon una piel con hongos capaz de percibir la luz y el tacto, según informó New Scientist. Esto hizo que muchos fanáticos de la película celebraran la noticia, afirmando que se dio un primer paso para la construcción de un auténtico “Terminator”, y esto no hizo más que aumentar esa ilusión.
Para crear la piel se cultivó una especie de hongo llamado “Ganoderma sessile”, que forma una estructura conocida como micelio. Primero, los investigadores recubrieron un modelo cíborg de 18 centímetros con una sustancia llamada “agar” para estimular el crecimiento de hongos y después lo sumergieron en un líquido para cubrirlo con el hongo, con lo cual 5 días más tarde, el modelo estaba cubierto con una piel orgánica.
La investigación, que sigue pendiente de ser revisada por otros expertos, describe la posibilidad de fusionar sistemas biológicos y artificiales en un campo experimental, lo cual indicaría un gran avance en este tipo de tecnología.
“El micelio, cultivado mediante técnicas establecidas, creció homogéneamente en la superficie del modelo de cíborg, demostrando una robusta reactividad a diversos estímulos, como la exposición a la luz y el tacto. Esta innovadora fusión apunta hacia el futuro de los biomateriales sostenibles y la posible integración de estos materiales en tecnologías nuevas y existentes”, confiaron los autores de la investigación.
En este sentido, los investigadores, Antoni Gandia y Andrew Adamatzky, aseguraron que la piel de hongos es fácil de producir y puede detectar una gama más amplia de cosas, y pusieron un ejemplo: “Hay una escena en ‘Terminator’ en la que implantan la piel al robot. La piel es externa a él, sin embargo, informa sobre datos al robot y se autorepara. Queríamos demostrar que ya podemos hacer cosas así”.
Ventajas a tener en cuenta
A diferencia de las pieles de silicona utilizadas en la actualidad, que tienen capacidades sensoriales limitadas y son difíciles de fabricar, esta nueva piel de hongo, llamada entre otras formas tegumento, ofrece una oportunidad más amplia para la recopilación de datos a un costo de producción más accesible.
Lo cierto, es que los resultados de esta investigación, publicados por los dos científicos en agosto pasado, son en verdad sorprendentes. Es que la piel robótica hecha de hongo es ligera y sensible al tacto, tiene la notable capacidad de autocurarse cuando se daña, siempre que se le proporcione los nutrientes necesarios para su regeneración.
Esto se asemeja a cómo cuidamos nuestra piel con alimentos y vitaminas para mantenerla saludable. Por otra parte, si bien los primeros prototipos ya están en la mente de los investigadores de esta innovadora idea, lo que todavía resta saber es cuando se podrán ver y en dónde se haría una presentación oficial de algo que seguramente será nueva para todos, y que ya se cree ocupe un lugar en el mundo de la ciencia ficción y la realización de nuevas películas.