Si sos de esas personas que no pueden tener su teléfono celular muy lejos de su alcance, si lo llevas a todos lados y necesitas chequearlo pasados algunos minutos, seguramente serás de esas personas que no lo pueden ver apagado ni siquiera de noche.

Hace algunos años, los fabricantes de teléfonos celulares recomendaban realizar las cargas de batería con el equipo apagado. Según se decía, eso hacía que la batería no se dañe y, por consiguiente, estaríamos cuidando la vida del móvil.

Con el avance de la tecnología, los mismos fabricantes son los que aseguran que realizar la carga con el equipo encendido no va a generar un perjuicio en sí mismo. De todas maneras, hacerlo de una forma u otra, repercute en algunos aspectos que detallaremos a continuación.

Al cargarlo apagado, el equipo no consumirá ningún tipo de recursos: si está encendido es factible que recibas distintas notificaciones que (des) optimicen la carga. Si está apagado, el teléfono no realizará ninguna acción y la carga será más efectiva y la batería durará más.

Otro de los beneficios es la rapidez de la carga, ya que al no ejecutar ninguna acción, el smartphone aprovechará mejor la energía y cargará más rápido, utilizando el voltaje correcto del tomacorriente. 

Si sos de cargar tu teléfono por la noche, hay otro provecho que podés sacarle manteniéndolo apagado y que no tiene que ver con la batería, sino con un correcto ciclo de sueño. Según la Organización Mundial de la Salud, las radiaciones que tienen los teléfonos celulares pueden ser peligrosas para la salud de las personas, ya que emiten radiaciones durante todo el día. 

Tanto las notificaciones luminosas como las vibraciones emitidas por el aparato afectan al funcionamiento de la hormona encargada de regular el sueño, cuya producción se ve disminuida, ya que las ondas emitidas pueden afectar al sistema nervioso. Esto puede alterar el ciclo del reloj biológico, lo que se denomina insomnio tecnológico.

¿Cuándo se recomienda cargar un smartphone?

Siempre es bueno remarcar que el procedimiento ideal para cargar la batería de tu teléfono móvil es hacerlo cuando esta ya se acabó completamente. Con el ritmo de vida actual, y lo indispensable que se ha tornado la telefonía móvil, es muy poco probable que alguien pueda dejar que su teléfono se apague en cualquier momento del día y en cualquier lugar, para volver a cargarlo.

Teniendo en cuenta eso, podemos acercarnos lo más posible a ese ideal y hacerlo cuando tiene la menor carga que se pueda, sin correr el riesgo de quedarnos sin batería en medio de nuestra jornada.

Sumado a ello, lo mejor es que lo desenchufes cuando la batería marque que está completa al 100% y no dejarlo horas y horas cargando más del límite. Por esta razón es que tampoco se recomienda hacerlo por la noche, ya que es muy probable que ese límite se sobrepase y la batería se dañe.

La vida útil de la batería va a depender, básicamente, de la calidad de las cargas que le realices. De todas formas, actualmente no son tan delicadas como solían ser, por lo que estas recomendaciones son el ideal y, claramente, luego se adaptan a la realidad.