El hombre que vislumbró el futuro
Crónica Fenómenos Paranormales La historiadora Bibiana Bryson es la depositaria de reveladoras psicografías que nos sumergen en las profecías del argentino, que aún hoy siguen vigentes sorprendiendo.
Por Marcelo Peralta Martínez
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Hablar sobre Benjamín Solari Parravicini, el profeta argentino que además fue artista plástico, pintor, dibujante, escultor, y que toda su vida fue un bohemio hasta el momento de tener un encuentro con el misterio, resulta atrapante. Es que, según lo que él mismo afirmó a sus allegados, una voz gutural que a la madrugada de alguna forma lo inspiraba y le decía que lo iba a guiar, con su mano, en finos trazos, y que día a día iban a escribir juntos eventos por venir. Eso que se ha dado en llamar profecía.
Cabe destacar que si bien se conocían muchos adelantos, sus profecías lo hicieron popularmente conocido a nivel internacional cuando se cumplió el atentado a las Torres Gemelas.
La actual depositaria
Lo concreto es que Benjamín Solari Parravicini (BSP) dejó un legado de más de 700 psicografías proféticas, tesoro que están en poder de la actual depositaria Bibiana Bryson, escritora e historiadora de la vida de este polifacético personaje de Olivos que alguna vez fue abducido por un OVNI.
El hecho narrado por Bryson sucedió cerca de la Avenida 9 de Julio, en la década del ´60 cuando se encontró "con seres diferentes a nosotros, de más de 2 metros de alto, de ojos extremadamente claros, celestes casi blancos, cabellos rubios y muy blanquesinos de piel, vestidos de una forma futurista", afirma Bryson, convencida de que ha llegado el momento de revelar la increíble obra.
"Este encuentro cercano del tercer tipo, en pleno corazón de Buenos Aires, fue publicado por la revista Esquiú y en el diario La Razón...”, recuerda la investigadora, que agregó: “él tuvo muchos encuentros de este tipo, en el tren, en Belgrano y en diferentes lugares”.
En la charla exclusiva con Crónica, Bryson describe estas profecías como totalmente modernas, a pesar de que fueron dibujadas en los años ´30 del siglo XX, cuando Parravicini "empezó a recibir estos dibujos proféticos de entidades y seres superiores, como él los denominaba, desde otro plano de conciencia. Son psicografias acompañadas de un epígrafe. Obras que se presentan con gran exactitud y en todos los ámbitos de la actividad humana. Psicografias inéditas y originales, nunca antes publicadas. El color del papel, un papel antiguo, de las décadas del ´30, ´40 y ´50 dependen de las psicografias. No es un papel blanco, es un papel que ha pasado el tiempo. Es un papel que lo usaban en el banco, a veces agarraba un talonario, a veces otro, y por eso hay de diferentes tamaños también. Son según el block de papel que él tenía cuando recibía todos estos mensajes tipo psicografías. Dictadas”.
Otras realidades
La historiadora amplía su impresión: "Lo que cabe destacar es que es por evolución espiritual y por su misión él de alguna manera, tomó contacto con otras realidades. Desde pequeño era un niño diferente, inusual, donde él podía ver elementales o estas energías que rodeaban a las plantas y a la naturaleza, la cual de alguna forma lo conecto a ese mundo espiritual. Poco a poco lo que él decía y dibujaba se iba cumpliendo".
Bryson recuerda: "Al principio no era consciente de lo que hacía, esbozaba muchísimo de estos dibujos que luego descartaba porque no le encontraba un significado o el por qué los hacía. Percibía ganas y se despertaba de madrugada, a la noche o durante el día. Silvia me contó que había veces que él se abstraía de la realidad y comenzaba a pintar estas profecías. Dibujaba tranquilamente, como si estuviese solo, abstraído de su entorno y viviendo algo más. El no sabía que era, ni para que década era".
Sobre su rol, Bryson comentó la responsabilidad que siente al guardar las psicografías. “Es un tema con cosas muy profundas, muy esotéricas, la cual me colocó en una situación de mucha responsabilidad, pero recibo tanto apoyo de Silvia y la familia Parravicini que será importante dar este mensaje a conocer” Su labor no sólo es cuidar estas obras inéditas, que son “700 dibujos que jamás fueron mostrados o publicados en algún lugar. Excepto una decena que ya permití ver, pero nunca fueron publicadas en libros, sino también preservar de que esto no llegue a manos inadecuadas, que no se venda, que no se lucre con eso, como Silvia me encomendó”.
Mensajes proféticos
Eran para generar conciencia en la humanidad. Así, Parravicini dibujó una “Cabeza de barba” que se trata de la asunción al poder de Fidel Castro en Cuba, en 1959. Y lo mismo ocurrió con Adolph Hitler y Benito Mussolini. Además, entre sus obras proféticas aparece la bomba de Hiroshima, “un dibujo que hizo en 1933” cita Bryson.
“Todo esto es un buen momento para darlo a conocer, porque en el mundo se están dando un montón de acontecimientos que así nos lo están indicando a nosotros. Estamos en los albores de un gran cambio planetario, donde están ocurrieron muchísimas cosas. Estamos viendo infinidades de femenologías, como lo profetizó al citar mucho el tema del contacto extraterrestre, del un futuro contacto masivo, y sabemos que cada vez están apareciendo en diferentes partes del mundo objetos cilíndricos, esféricos, a plena luz del día”, explica Bryson.
La historiadora agrega que "cada vez son más los testigos que dan evidencia de presencia extraterrestre en la Tierra. Sabemos que algo está cambiando, que la frecuencia y la vibración del planeta está cambiando. Algo nos está indicando que nos acercamos a pasar por el centro de la galaxia. Y que como decían otras civilizaciones, incluso los mayas, vamos a dar un salto cuántico y algo va a cambiar en muchos de nosotros. Se producirá un cambio en el ADN del ser humano, cosas que se van a activar, y por eso las personas van a empezar a ver y a vislumbrar otras formas de vida”. La depositaria confió también que después de ver algunas obras con una grafóloga.
“Pudimos comprobar que a veces las letras eran más apretadas, en otras veces más redondita y alargada y eso también hay que destacarlo porque no siempre eran las mismas entidades las que hacían contacto con él. Eran mensajes de amor y de grandeza para futuras generaciones, para poder cambiar o advertir cosas que irían sucediendo. Una profecía nos está advirtiendo y enseñando como modificar nuestro entorno para ser mejores personas. Que tratemos de vivir en armonía y que compartamos. Esas cosas él quería, el acercamiento entre las personas para que tratemos de ser mejores” afirmó.
Bibiana Bryson, muy enfocada en el tema, agrega: “Las psicografías que se cumplieron fueron cientos, no sólo aquí sino del mundo, como adelantos tecnológicos, de religión, de la fe, saltos cuánticos. Habla del contacto extraterreste, de lo social, lo político, lo económico. Sobre guerras y un montón de otras cosas. No quiero que se vea como catastrófico, a veces la gente tiene miedo quizá presionada por el tema económico que hay y a eso le sumamos más, es una presión psicológica para el que lo lea. Hay que crear una armonía, sin faltar a la verdad, equilibrar las energías y la información”.
Bibiana Bryson Sumergida en una pasión
La actual depositaria de esta increíble obra es escritora e historiadora de la vida BSP, y el 30 de septiembre de 2017 publicó un libro “La familia Parravicini, pionera de Vicente López”, que se presentó en la casa de Cultura de ese Municipio, junto a autoridades comunales e historiadores de primera línea que han escrito sobre la historia de la zona. Según comentó Bryson, "las profecías son advertencias para la humanidad" y por eso la importancia de semejante responsabilidad, tarea que viene realizando desde hace años.
¿Cómo llegan a sus manos?
Silvia Landrock de Carulla, conocida como Kitty, fue asistente y colaboradora del profesor Alejandro Erú, ambos depositarios de las psicografías dado que conocían personalmente a Solari Parravicini, y que lo habían visto dibujar algunas de sus obras, de igual forma que Sigurd Von Wurmb, y más adelante en el tiempo el reconocido ufólogo Pedro Romaniuk.
Bryson recibió de Kitty todo este material que le había legado el profesor Erú, quien compartía una estrecha amistad con BSP y además era Parapsicólogo, Profesor de Humanidades de la Universidad de La Plata y fue el primero en difundir la obra de su amigo e investigar todos los hechos parapsicológicos.
Bryson contó que Erú se juntaba con otros amigos, artistas plásticos y escultores, a hablar de todos estos temas paranormales, en la guardilla, en la última morada del profeta.