Uno de los puntos turísticos más fuertes de la Argentina es Villa Carlos Paz, en la provincia de Córdoba, donde muchos eligen para pasar sus vacaciones o bien tomarse unos días en alguna escapada. 

En esta oportunidad, la cita fue otra. Una mujer le alquiló su casa a un grupo de jóvenes que viajaban para hacer una despedida de soltero. Sin embargo, luego del checkout, ella fue a limpiar la vivienda y la encontró hecha un desastre. 

Lucrecia, dueña del lugar, subió un TikTok con las imágenes que se hicieron viral rápidamente. En ella, se ve destrozos de todo tipo, además de la suciedad dejada en varios lados. 

Contexto: alquilamos a 12 porteños la casa, para una despedida de soltero...”, comienza el video publicado en la red social. Acompañado de una serie de imágenes verdaderamente increíbles, completó: “Pagaron los daños, claro, pero, ¿en serio se puede dejar una casa así”. 

Viral: Las imágenes del TikTok con los destrozos de una casa en Carlos Paz

Los destrozos fueron totales. Sillas de plástico y cerraduras completamente rotas, suciedad en los pisos, en la cocina y en la heladera, la cual dejó de funcionar. Además, arriba de la mesa, había comida de hace varios días. 

La mujer dialogó con La Nación y contó que, luego de lo sucedido, se acercó “con un grupo de chicos que ayudan con la limpieza” y encontró la casa en esas condiciones, hecha un desastre. 

Y pensar que en sus hogares no deben de tirar ni un papel. No entiendo cómo pueden romper tantas cosas. Son unos animales. Te puedo entender que dejes sucio o rompas una silla de plástico. Pero ¿cómo rompés un inodoro así?”, criticó enfurecida. 

Ella es dueña de un alojamiento turístico llamado Quiko Amadeo. Se trata de una casa privada ubicada en el barrio Villa del Lago de Carlos Paz. Cuenta con pileta, asadores, una galería y el frente vidriado da a las sierras. No es la primera vez que alquilan para este tipo de eventos, además de cumpleaños y casamientos, pero sí que vivieron una situación así. 

Sobre el grupo de jóvenes, que eran de entre 28 y 35 años, la mujer aclaró que se contactó con ellos y les envió las fotos. “Se disculparon y pagaron la totalidad de los gastos. En ese sentido no tuve inconvenientes. Tuvieron predisposición, volvieron después de todo esto y tuvimos la mejor. Son cosas que pasan y trato de no perder la fe en la juventud, ya que el lugar está pensado para ellos”, recalcó la mujer. 

Y completó: “Son cosas para las que uno está preparado y duelen. Es difícil llegar y encontrarte con tus cosas en ese estado. No todo el mundo tiene la cultura de la limpieza y de tratar el alojamiento como si fuera su propia casa. Al margen de que paguen los daños, lleva un tiempo arreglar todo, no es solo ‘rompo y lo pago’”.