Vendió su auto y siete años después se enteró de que le seguían cobrando la patente
Una vecina de la provincia de Río Negro asegura que, ni bien realizó la operación comercial, efectuó las presentaciones del caso ante el Registro de la Propiedad del Automotor. ¿Cuánto adeuda y qué deberá hacer al respecto?
Una habitante de la ciudad rionegrina de Villa Regina se encontró con la desagradable sorpresa de una deuda a su nombre de años por el Impuesto de Patentes, pese a haber vendido su auto en 2015. Enfurecida, recurrió a la Justicia para que actualicen la información, mediante la presentación de una acción de "habeas data".
La mujer había hecho la operación dentro de la misma provincia, donde un hombre de Zapala le había comprado su Suzuki Fun.
A pesar de que presentó enseguida la denuncia de venta en el Registro de la Propiedad del Automotor, la información nunca llegó a la base de datos de la Agencia de Recaudación Tributaria de Río Negro (ARTRN), por lo que ahora figura como deudora del gravamen por $15.000, reportó LMNeuquen.com.
La afectada hizo un reclamo ante el organismo recaudador, pero no logró que se modificara el nombre de la persona obligada al pago del impuesto por el Suzuki Fun que había vendido en 2015.
La respuesta de la ARTRN fue que nunca había recibido la denuncia de venta por lo que, según los registros del organismo, la mujer era la única titular del auto y de la deuda.
¿Qué suerte corrió su reclamo ante la Justicia?
La afectada efectuó una acción de "habeas data" ante el Juzgado Civil N° 21 de Villa Regina y, en las últimas horas, obtuvo un fallo favorable.
La sentencia ordenó a la ARTRN que, "en el término de 5 días, sustituya al sujeto obligado al pago del impuesto automotor” del Suzuki Fun y que, ese cambio de nombre, sea retroactivo al 5 de agosto de 2015, fecha de la denuncia de venta que hizo la mujer ante el Registro de la Propiedad Automotor.
El fallo dispuso además que la deuda acumulada no sea atribuida a la mujer. Asimismo, el organismo recaudador deberá “tomar razón” de la identidad y otros datos personales del hombre que compró el auto, según la sentencia.