“La cruda realidad es que la sanidad en Ituzaingó no funciona”, expresó con elocuencia Marcela, vecina de Villa Udaondo. En dicho barrio del mencionado distrito, uno de los dos centros de atención primaria de la salud permanece cerrado desde hace más de 7 meses, por obras que están paralizadas, prácticamente, desde su inicio. Mientras tanto, los habitantes de la zona aseguran que son derivados a un centro comunitario, que no dispone de profesionales, y por ende, tampoco de turnos de atención suficientes a la creciente demanda de atención.

La “Salita 17 de octubre” —como la llaman los propios residentes de Udaondo—, cerró sus puertas en junio pasado, por la puesta en marcha de mejoras edilicias. Pero con el afán de garantizar la buena salud de los vecinos, se trasladó el funcionamiento del CAPS a un centro de desarrollo, situado a dos cuadras. Sin embargo, quienes acuden allí reconocen que la atención no es la misma.

En este sentido, Jimena enfatizó que “los médicos no dan abasto, por eso no otorgan muchos turnos, porque además hay poquitos consultorios para tantas especialidades. En 7 meses todavía no hicieron nada”. Al respecto, el Secretario de Infraestructura, Desarrollo y Ambiente Municipal, Martín Rossi, señaló que “las obras no avanzaron porque los costos se tornaron imposibles de afrontar, ante una inflación sin freno. Por lo tanto, vamos a tener que llamar a licitación nuevamente, dado que con el presupuesto del año pasado no se puede hacer nada”.

"Los médicos no dan abasto, por eso no otorgan muchos turnos, porque además hay poquitos consultorios para tantas especialidades".

Pero simultáneamente se agudiza el enojo de quienes requieren de al menos una consulta, producto de las dificultades que deben superar para ser recibidos por un médico. Al respecto, Samantha dio cuenta de dicha odisea, al revelar que “fui a sacar turno y me dijeron que tenía que venir antes de las 7 horas, porque sólo se dan 10 turnos. En mi caso, necesito la atención de una diabetóloga, que en principio estaba dos veces por semana, y ahora solo está lunes. Eso implica que sea imposible poder tener un turno, y que en un solo día la doctora tenga una larga fila de pacientes a su cargo”. A su vez, Chiara también reflejó que “te cancelan los turnos a último momento, y después tardan más de un mes en otorgarlos”.

Ituzaingó: el drama de vecinos que no pueden ser atendidos por problemas de salud

Los vecinos de Udaondo destacan que la situación sanitaria es alarmante, y el principal factor de semejante detrimento radica en la escasez de especialistas y de personal administrativo. Con relación a ello, Alicia afirmó que “los profesionales y los empleados van a trabajar sin saber cuándo les van a depositar el sueldo”. Al mismo tiempo, Jimena sostuvo que “muchos médicos se van porque no les pagan”. No obstante, Rossi, quien también Interviene en el área de salud municipal, manifestó que “el traslado nos generó muchos dificultades, como no contar con los médicos necesarios. Calculamos que este mes ya vamos a estar ordenados, con las contrataciones de más especialistas”.

Sin embargo, el centro de atención González Otharam —también ubicado en Villa Udaondo—, presenta las mismas carencias. En este sentido, Noelia reconoció que “tampoco hay médicos. Vas y te dicen que no hay turno o que el médico se fue. Mi bebe tiene 6 meses, y nunca encuentro un pediatra. Vas con fiebre, o con dolor de cabeza intenso, o te cortaste, y te dicen que vayas a otro hospital”.

Por lo tanto, muchos vecinos deben emprender viajes de más de una hora en transporte público para ser recibidos en establecimientos sanitarios de distritos vecinos, y otros tantos abonan una consulta de más de 5.000 pesos en hospitales privados, o profesionales particulares. Opciones que escogen desde hace más de 7 meses, período que se extenderá aún más, según reconocen desde el Municipio, y que a su vez prolonga el malestar vecinal.

Por Matías Resano.