La locura y las emociones enardecidas con la que se vive en la sociedad se replicó, en este caso, en la localidad bonaerense de Beccar, cuando un hombre atacó salvajemente a un joven, acusándolo de haberle escupido su auto. La víctima recibió golpes de puño y hasta una patada en la nuca, y por fortuna no hubo que lamentar un hecho fatal.

En diálogo con TN, Daniela -la madre del joven atacado- contó que su hijo recibió una paliza sin ningún tipo de razón: “Este violento le pegó a mi hijo porque sí", comentó. Según testimonios al medio citado, el chico de 16 años salía de su colegio y se dirigía a su hogar, alrededor de las 13.

En una de las filmaciones captadas por las cámaras de seguridad de un comercio, se pudo observar cómo el joven retornaba a su vivienda en compañía de otro chico, en lo que se presume su compañero de escuela. La víctima llevaba puesto el uniforme del colegio, junto con la mochila en su espalda y una bolsa en su mano derecha.

De repente, apareció en escena un auto color bordó que realizó una maniobra en U en plena avenida Centenario, en el cruce de las calles Parodi y General Guido, para interceptar a los chicos que venían caminando por la vereda contraria. El vehículo se detuvo y del auto bajó un hombre exasperado, directamente a golpear al joven menor de edad.

En el video se pudo captar el momento en el que el individuo de identidad desconocida le proporcionó golpes y empujones, arrojándolo al suelo para luego propinarle una patada en la nuca. Un transeúnte alcanza a mediar palabras con el agresor luego de la paliza al joven, en pos de calmar las aguas.

La discusión continuó un rato más a medida que personas cercanas al episodio violento se arrimaron a corroborar qué había sucedido. Segundos más tarde, uno de los jóvenes involucrados en la embestida cruzó corriendo la avenida para subirse a un auto y escapar de la situación embarazosa.

La madre del joven atacado realizó la denuncia

Daniela realizó la denuncia penal correspondiente e informó los daños ocasionados: heridas en los brazos, un golpe de patada en la nuca y lastimaduras en los labios producto de aparatos fijos denominados brackets. La causa quedó caratulada como "lesiones".

"Una vez que mi hijo me relató lo que pasó, lo acompañé al sanatorio para que lo atendieran los médicos y después fuimos a la comisaría a hacer la denuncia", comentó la madre del joven agredido, quien agradeció la asistencia de una empleada de un banco financiero cercano al lugar de los hechos.

En cuanto al agresor, no se reveló su nombre pero se investigó que vive a cinco cuadras de la joven víctima y posee un taller mecánico como fuente de trabajo.