Paola Miranda fue una de las figuras del teatro de revista más populares de la década pasada. Su talento la llevó a participar del exitoso programa "Bailando por un sueño" y hasta se lució como cantante. Sin embargo, después de una década de mediática, la vedette bajó su perfil y decidió alejarse de los medios. Actualmente, tiene un emprendimiento de indumentaria íntima para mujeres y una línea de cremas para el cuidado de la piel en el exterior. 

Nació en Ecuador y vivió allí gran parte de su juventud, pero un día decidió emprender el desafío más importante de su vida y migró a Argentina para fines de los 90. El primer tiempo en nuestro país no fue fácil porque estaba alejada de su familia, pero pese a todo empezó a profesionalizarse como bailarina y tras varios castings, Carmen Barbieri y Santiago Bal la eligieron para sus obras de teatro y su carrera ascendió rápidamente.  

Paola Miranda llegó de Ecuador para ser bailarina. 

La fama en los medios y las agresiones del éxito

Debido a su belleza (ojos verdes y pelo bien negro), pero sobre todo por la simpatía que la caracterizaba, Miranda encontró un espacio en la televisión y se convirtió en una de las mujeres más buscadas para el teatro de comedia, revista y de humor. Asimismo, sin dudas fue una de las vedettes más preparadas y multifacéticas de la década pasada, ya que no solo era bailarina, sino que también se destacó como actriz, modelo y hasta cantante

Su fase de cantautora inicio casi como juego en "Bailando por un Sueño". En aquel entonces para hacer una buena previa a la presentación del número artístico, le cantó a Marcelo Tinelli la canción "Te voy a hacer el amor" y casi sin pensarlo se volvió furor en los medios y la incentivo a seguir incursionando por ese nuevo camino. Tiempo después, la ecuatoriana comenzó a deslumbrar con su voz y pegadizas canciones en los conciertos del conocido músico Juan Gabriel. Con él recorrió las ciudades más importantes de México y Estados Unidos. 

Un cambio de vida y una nueva profesión

Tras una etapa muy mediática con fuertes enfrentamientos con chicas del ambiente, se mudó finalmente a México para mejorar su carrera como cantante y tiempo después migró a Estados Unidos, donde vive tanto en Miami como en Nueva York. Muchos años después de su salida, Miranda reconoció que prefirió retirarse con la frente en alto y recordar los momentos más lindos de su paso por los espectáculos nacionales. Además, resaltó que no quería hacer sufrir a su hija ni a su familia.   

Luego de 17 años como artista, decidió empezar de cero y enfoco su presente a 3 emprendimientos en el exterior. En plena pandemia del Covid-19, sacó una línea de lencería y ropa interior para mujeres. Hace unos meses, también lanzo una pequeña marca de cremas para el cuidado de la piel con células madres y amplió su negocio de ropa incorporando una línea deportiva.

A pesar de que hace muchos años no está en Argentina, reconoce que extraña el país, pero que no volvería a instalarse aquí. Sus redes sociales son su conexión contante con sus seguidores no solo de nuestra región sino también del mundo. Además, aprovecha el espacio para mostrar la ropa y los distintos eventos artísticos que realiza.