Nieve en Capital: en medio de una ola de frío polar se cumple un nuevo aniversario del último registro
Hace 17 años los porteños presenciaron un fenómeno natural que tiñó de blanco las calles de la Ciudad.
El 9 de julio de 2007 la nieve cubrió la Ciudad de Buenos Aires en una jornada histórica. En ese entonces, las bajas temperaturas y otros factores climáticos dieron lugar al único evento climático de este tipo en los últimos 106 años.
Hace 17 años, los porteños fueron testigos de un fenómeno natural que tiñó de blanco las calles y les permitió pasar el día feriado jugando en la nieve y dejando registro del espectáculo.
Esa mañana nublada, comenzaron a caer copos de nieve en las localidades de Pergamino, Venado Tuerto y Junín, según el Servicio Meteorológico Nacional. A medida que avanzaba el frente helado, se extendió hasta llegar al Gran Buenos Aires, y finalmente a CABA.
Fueron cerca de diez horas ininterrumpidas de caída de nieve con miles de personas volcándose a las calles y los espacios abiertos para disfrutar el fenómeno y dejar una postal para la historia.
Ese 9 de julio también se registraron nevadas en Santa Fe, Córdoba, San Luis, Mendoza, San Juan, La Rioja y Catamarca.
Previo a ese evento, la última vez que cayó nieve en la ciudad fue en 1918, lo que demuestra lo poco frecuente que es en el clima de la región.
¿Qué tiene que ocurrir para que nieve en Buenos Aires?
Este martes 9 de julio el termómetro marcó -2° en CABA. Las temperaturas cercanas a los 0 grados son uno de los factores que inciden en la producción de nieve, aunque no es el único y derían darse una serie de eventos para que el AMBA vuelva a teñirse de blanco.
En la Ciudad de Buenos Aires, caracterizada por su clima templado y húmedo, debería primero ingresar una masa de aire polar muy frío desde el sur, bajando las temperaturas a los 0°C. Además, debe existir suficiente humedad en la atmósfera para que se formen precipitaciones.
En mayo se presentó también esta posibilidad debido a una fuerte ola polar proveniente del sur del país que generó una disminución de la temperatura llamativa para la época del año.