San Vicente: la zona de la laguna, una atracción de la región que el municipio abandonó
A la sequía en este lugar, se suma un profundo estado de abandono y desolación, mientras el municipio se encuentra completamente ausente.
Por Matías Resano.
La ciudad de San Vicente está perdiendo uno de sus patrimonios más preciados, que marcan su sello de distinción, como lo es la zona de la laguna, que por estos días refleja un profundo estado de abandono y desolación, producto de una promesa de reformas por parte de las autoridades municipales que brillan por su ausencia. Por lo tanto, los visitantes optan por otras opciones de paseo, lejos del mencionado rincón del distrito.
Llegaba el domingo y la laguna de San Vicente y sus alrededores representaban una de las principales atracciones para miles de turistas, que llegaban desde diferentes puntos del conurbano. Sin embargo, por estos tiempos ya no se advierte un arribo masivo de foráneos ni tampoco abundan los espacios verdes para sentarse en los alrededores, como sucedía en épocas no muy lejanas. Hoy sobran las zonas parquizadas, reflejo de la cada vez más reducida presencia de visitantes, consecuencia de un deterioro cada vez más notable.
A la sequía del espejo de agua se le añadió la desatención de los espacios que lo rodean, entre ellos, el camping municipal. Este es empleado para los exámenes prácticos de manejo, la verificación técnica de vehículos y como depósito de automóviles, simultáneamente. Justamente esta improvisación de estacionamiento de rodados municipales les quita disponibilidad de lugar a quienes desean disfrutar de una jornada de fin de semana en el establecimiento.
En este sentido, Leandro Ameri, concejal de San Vicente, consideró que “es una locura que la gente esté entre máquinas viales, y autos municipales. Hay un abandono por parte del municipio”. A su vez, Ameri reveló que “iban a trasladar el camping. Prometieron a hacer otro nuevo en el lado este de la laguna, y no se hizo nada”.
No obstante, las autoridades municipales anunciaron un área comercial en las orillas de la laguna. En este sentido, el mencionado legislador dejó en claro que “nunca hubo un proyecto formal”. Por si fuera poco, los accesos permanecen bloqueados por supuestas razones de seguridad y también por los exámenes prácticos para quienes aspiran a obtener la licencia de conducir, alejando a los visitantes.
Por todas estas razones, el turismo decrece en San Vicente y escoge localidades aledañas, como Cañuelas, causando un daño severo a la esencia del primer distrito, la cual radica en su laguna y en las visitas que atrae. Por esta razón, la preocupación vecinal se agudiza ante la falta de respuestas y de argumentos desde la intendencia.
Por M.R.