Los trabajadores del subte agrupados en el sindicato AGTSyP realizaron este miércoles un paro de actividades en las líneas B y C entre las 5.30 y las 7.30, para insistir con su reclamo de dos francos semanales y reiterar su denuncia de la existencia de asbesto en las unidades, al que definen como un mineral muy peligroso para la salud.

Nuestra intención es reducir la incidencia de todos esos factores insalubres para salvaguardar nuestra salud y, por extensión, la de los usuarios”, manifestó en un comunicado Claudio Dellecarbonara, dirigente por la minoría del Secretariado Ejecutivo de AGTSyP, además de metrodelegado de la línea B.

Entre los reclamos están la desabestización inmediata de toda la red mediante el cambio de las flotas presuntamente contaminadas, la reposición del personal faltante y la reducción de la exposición a los factores insalubres a través de la implementación de dos francos semanales.

En un ámbito de trabajo con decenas de factores insalubres y nocivos para la salud, seguimos exigiendo la reducción de la jornada semanal para obtener dos francos”, enfatizó Dellecarbonara.

¿Cómo sigue el plan de acción gremial?

Respecto de la eventual realización de un nuevo paro de actividades, resaltó: “Nuestra decisión es clara: llevaremos adelante todas las medidas que estén a nuestro alcance para obtener la respuesta que necesitamos para salvaguardar nuestra salud y nuestras vidas, y la de los usuarios y vecinos del subte".

En un comunicado difundido antes del paro de este miérrcoles, los secretarios general y adjunto del gremio, Roberto Pianelli y Néstor Segovia, informaron que tanto el sindicato como autoridades de la empresa concesionaria Emova mantuvieron reuniones por el “pedido de reducción de la jornada laboral para tener dos francos”.

El motivo principal del reclamo, puntualizaron en el parte, es “por cuestiones de salud para disminuir la exposición al asbesto, un mineral cancerígeno cuya presencia en la red subterránea salió a la luz en el año 2018″.

La posición de la empresa concesionaria

Emova, por su parte, emitió un comunicado relacionado con el paro de este miércoles, en el que sostuvo que "lamenta que estas medidas sindicales perjudiquen directamente a los usuarios, en una franja horaria muy sensible en que el subte es utilizado mayormente para trasladarse a sus respectivos trabajos o actividades educativas".

"La compañía ha asistido a todas las audiencias desarrolladas por las autoridades laborales de la Ciudad (de Buenos Aires), manifestando en reiteradas oportunidades su disposición a analizar cambios en sus esquemas de trabajo, advirtiendo que resulta inviable reducir una jornada de 36 horas sin afectar las actividades de operación y mantenimiento de la red de subte”, finalizó la empresa.