Las redes sociales suelen tener distintos usos. Uno de los que le dan los usuarios es para dar con el paradero de un ser querido o también de una mascota, que son consideradas parte de la familia. En este caso, unos chicos hicieron a mano unos tiernos carteles para poder hallar a "Uno", su gatito que se había perdido. La historia se hizo viral y encontraron al felino.

El usuario de Twitter @soslayable contó que caminaba por el barrio de Almagro cuando se percató de que habían distintos dibujos pegados por la zona. En estos carteles se podía leer: “Perdimos a nuestro gato”.

Al ver esta situación, el internauta quiso dar una mano para hallar a la mascota y también para hacer feliz al niño. Es por eso que le sacó unas fotos a los carteles y las compartió en la red social del pajarito. "Al parecer un nene perdió un gatito en Almagro e hizo todos los carteles a mano dibujandolo", expresó. 

Ese gatito se llama "Uno" y era buscado por Tobías, de 9 años, y su hermanita de 5. En la noche del lunes el animal aprovechó que una ventana del departamento en donde vive la familia estaba entreabierta, debido a que una estufa estaba prendida, y se escapó. “Nunca imaginé que por ahí se podía escapar”, sostuvo la madre los niños.

La mujer reveló que la inesperada desaparición del felino les generó mucho tristeza a los chicos y les propuso colaborar en su búsqueda, tal como lo harían todos los integrantes de la familia. De ese modo, tratarían de recuperar más rápido a Uno.

Fue así que agarraron unas hojas, se sentaron en la mesa y con un marcador dibujaron los carteles para poder pegarlos por el barrio. “Perdimos a Uno, nuestro gato. Es blanco y negro”, decían los carteles con el número de celular para que la gente llamara. "Los hicieron con mucho amor", reconoció Moira, la mamá de los nenes.

Finalmente, la madre, luego de haberle avisado de la búsqueda a todos sus vecinos, volvió a su casa y al tranquilizarse comenzó a pensar dónde se pudo esconder el gatito. “Me puse a pensar que no había manera de que saliera a la calle, por eso me puse a buscar por los rincones del edificio y lo encontré escondido en una de las bauleras. En ese momento me volvió el ama al cuerpo y se me fue el bajón”, precisó.

Al recuperar a Uno, los chicos se pusieron muy felices. Ahora no se separan de su mascota que fue adoptada en un refugio. En tanto, la mamá estaba tranquila que el gato de la familia estaba bien, pero ahora tenía otra misión. “Cuando apareció fui a sacar los carteles que horas atrás había pegado”, sentenció.