Lo detuvieron por manejar borracho, discutió con los agentes de tránsito y su esposa lo retó frente a todos
Un hombre fue detenido en un control de tránsito y el test de alcoholemia al que se sometió le dio positivo. El sujeto se negaba a dejar su vehículo y su pareja avergonzada por la situación lo hizo entrar en razón. Mirá el vídeo.
Un insólita situación sucedió en un operativo de tránsito que se realizaba en la Ciudad de Buenos Aires. Un hombre dio positivo de alcoholemia mientras manejaba, se negó a dejar su auto y su esposa lo retó para que no discuta con los agentes. El hecho se viralizó en las redes sociales.
El hecho sucedió en las últimas horas en las calles de la Ciudad. Un matrimonio regresaba a su casa luego de asistir a una reunión familiar cuando a unas pocas cuadras de su domicilio fueron detenidos en un control de tránsito.
El conductor se sometió al test de alcoholemia y el mismo le dio positivo al superar el límite permitido de alcohol en sangre. El sujeto se molestó tras recibir esta noticia y comenzó una acalorada discusión con los inspectores de tránsito.
En el vídeo, se ve el momento cuando la agente le indica cuál fue el resultado de su prueba. "1,14 positivo de alcoholemia, señor", le informó la inspectora, pero el infractor le advirtió: "Yo te voy a decir que del auto no me voy a bajar".
Ante la negativa del hombre, la agente le avisa que llamará a un móvil policial para que le retengan su auto. No obstante, el conductor se enojó y empezó a exigirle a la funcionaria que le devolviera los documentos que le solicitaron antes de someterse al test. “Llamá a quien; dame los documentos. No no, los documentos son míos”, le contestó.
El hombre quiso convencer a los agentes para que no se llevaran su coche. “Pago lo que haya que pagar, pero dame los documentos”. En ese momento, la esposa del sujeto intervino al ver que la situación estaba volviendo más tensa. "Ahora jodete, ahora esperá que ellos hagan lo que tengan que hacer, te dan el documento y nos vamos”, le dijo.
Sin embargo, el conductor insistía que se encontraba a tres cuadras de su vivienda y que no tenía ningún inconveniente para manejar. "Te puedo manejar con los ojos cerrados, vendame los ojos te manejo de acá hasta mi casa", sostuvo.
Al ver que su esposo no deponía su actitud, la mujer lo retó como si fuera un niño. "Dejá el freno de mano y vamos a casa, sé adulto. Dejale las cosas y vamos. Aguantátela", le ordenó. De esta manera, el hombre entró en razón y se retiró caminando junto a su pareja. "Muy bien, gracias. Muy amables", sentenció el infractor.