La Conferencia Episcopal pidió asistencia a los comedores comunitarios y dijo que "la comida no puede ser una variable de ajuste"
La Comisión Ejecutiva de la CEA, presidido por monseñor Oscar Ojea, emitió un comunicado en el que advirtió que "cientos de miles de familias" en el país tienen problemas para "alimentarse bien". Los detalles, en la nota.
La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) advirtió este lunes que "cientos de miles de familias" en el país tienen problemas para "alimentarse bien" y afirmó que "la comida no puede ser una variable de ajuste", por lo que los comedores comunitarios, entre otras instituciones sociales y religiosas, deben recibir asistencia "sin dilación" para que la situación "no profundice la crisis alimentaria".
"Como obispos, en el trato pastoral con la gente sencilla, hemos aprendido que 'Un plato de comida no se le niega a nadie'. Es que en nuestra patria nadie debería pasar hambre, ya que es una tierra bendita de pan. Sin embargo, hoy, a cientos de miles de familias se les hace cada vez más difícil alimentarse bien", expresó la Comisión Ejecutiva de la CEA, cuyo presidente es monseñor Oscar Ojea.
En ese documento, titulado "El pedido del pan de cada día es un clamor de justicia", y difundido a una semana de que el papa Francisco reciba en el Vaticano al presidente Javier Milei, la CEA resaltó que "es necesario anticiparse para que esta situación no profundice la crisis alimentaria", y en ese sentido consideró que "se debe facilitar a las personas, las comunidades y al pueblo aquello que se necesite para ayudar a los más frágiles, especialmente a niños, niñas, adolescentes y adultos mayores".
"Ante una crisis -mencionó el texto- no son suficientes los paradigmas tecnocráticos, sean estadocéntricos, sean mercadocéntricos, es necesaria la comunidad", afirmó.
El comunicado indicó que "la inflación desde hace años crece día a día y pega fuertemente en el precio de los alimentos", una situación que "siente claramente la clase media trabajadora, los jubilados y aquellos que no ven crecer sus salarios".
"Ante este escenario de trabajo sacrificado y de bajos ingresos, las familias se privan de muchas cosas. Por ejemplo, una mamá puede privarse de tomar un colectivo y camina para ahorrar, pero de ninguna manera puede no darle de comer a sus hijos. Es decir, la comida no puede ser una variable de ajuste", sostuvo.
El documento citó un fragmento del libro sapiencial de Tobías, en el Antiguo Testamento, que señala que "entre las necesidades primarias está el alimento", un motivo por el cual, continuó el texto, "Jesús se identifica con los últimos en la fila de la vida que padecen hambre, y dice: 'Tuve hambre y me diste de comer'".
La CEA recordó que el tiempo de la pandemia de Covid-19 "enseñó el valor de la respuesta comunitaria organizada" y que en aquel tiempo de emergencia sanitaria "se multiplicaron los comedores" en las parroquias, las Iglesias evangélicas y los movimientos populares.
Así, destacó que "las grandes protagonistas fueron las mujeres", porque "cada una se acercó a la olla pensando no sólo en sus hijos, sino también en los de los vecinos", mencionó la CEA.
La entidad católica valoró que "esa reserva" social "está todavía presente", y por eso "el Estado nacional, provincial y municipal tienen que aprovecharla para que nadie se quede sin el pan de cada día".
"Todos los espacios de cuidado que dan de comer, todos los comedores comunitarios, de parroquias, iglesias evangélicas y de movimientos populares deben recibir ayuda sin dilación", opinó la Comisión Episcopal.
Y agregó: "Toda esta comunidad, verdadero ejército de amor y servicio, está dispuesta a dar de comer ahora porque hace falta, pero sin renunciar a seguirse poniendo la patria al hombro, para que en nuestra querida Argentina se haga realidad el sueño de Tierra, Techo, y Trabajo para cada familia".
Organizaciones sociales reclaman asistencia ante emergencia alimentaria
El documento emitido por la CEA fue dado a conocer en simultáneo con la convocatoria de organizaciones sociales para este lunes, que se concentraron frente al Ministerio de Capital Humano, encabezado por Sandra Pettovello, para exigir respuestas ante la emergencia alimentaria.
La protesta, denominada "Fila de la pobreza", consistirá en la formación de una cola con personas que requieren asistencia.
La concentración, tiene como objetivo permitir que cada persona acceda al ministerio en busca de respuestas ante la crisis alimentaria agravada por la situación económica.
Según informó la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), la movilización será replicada en simultáneo en delegaciones de la Secretaría de Niñez y Familia en todo el país, y realizarán "una fila mediante la cual cada persona pueda ingresar al ministerio a los fines de obtener respuesta a la emergencia alimentaria agravada por la crisis económica".
Argentina cuenta en la actualidad con 41 mil comedores y merenderos reconocidos por el Estado y registrados en el Renacom. Estos establecimientos, cuya existencia es verificada y monitoreada por el gobierno, estiman alimentar a alrededor de cuatro millones de personas.