Gastón Pauls comenzará la tercera temporada de Seres libres, el programa que conduce en Crónica HD, el próximo viernes a las 22 y está feliz.

“Estamos muy contentos, grabamos algunas entrevistas a famosos y no famosos, pero el nexo entre esta sección y otras va en vivo. Si bien mantenemos el formato tradicional, incorporamos a las redes sociales todo lo relacionado con las adicciones para que sea más interactivo, también vamos a hablar de gente que superó enfermedades terminales y vive bien, más la problemática de la salud mental, suicidios, personas que han quedado postradas y a pesar de esa tragedia o condicionamiento, son libres, cuenta Crónica.

-¿Qué significa este nuevo debut?

-Es el primer ciclo de televisión que hago más de dos años seguidos, no pasó con ninguno de los anteriores y exitosos, como “Montaña rusa”; lo mismo sucedió con “Ser urbano” y “Todos contra Juan”. Sentí que cumplían un ciclo y que de alguna manera íbamos a repetirnos. Lo que me pasa con “ Seres libres” es que el mensaje es más importante que lo técnico y artístico. Todos los días recibo mil mensajes de gente pidiendo ayuda y ese es el éxito del programa: acompañamos y asistimos. A veces, simplemente consolamos a la madre que perdió a un hijo. La gente me cuenta que arrancó la recuperación por nuestro programa.

-¿Los testimonios de famosos ayudan a que salgan a la luz otras voces?

-Sin dudas. Cuando empezamos hace dos años, habló el Mono de Kapanga, luego Andrea Rincón y Fabi Cantilo. Fueron testimonios muy valientes y más cuando se trataba de mujeres, porque cuesta mucho más que las mujeres reconozcan la adicción. Muchas veces son señaladas de “reventadas” y el hombre que se droga es un “canchero”. Es terrible eso y eso, justamente, es lo que hay que cambiar. Ese es el desafío del programa. Un hombre y una mujer que consumen son enfermos que necesitan ayuda. Siempre agradezco la confianza de la gente del medio, que muchas veces actúa para demostrar que está bien, pero todos somos seres endebles y frágiles.

Empatía real

Pauls hizo especial referencia al reciente suicidio de María Onetto. “Todos la amábamos como actriz, para mí es una de las mejores de la Argentina, pero lo que le pasó a ella le sucede a desconocidos, al rico, al pobre, al gay, al heterosexual, al cristinista, al macrista; les pasa a todos”.

También, recuerda que el año pasado grabó ocho programas con políticos, “pero lamentablemente, gobernadores, presidentes o expresidentes han rechazado la invitación. Este tema le puede ocurrir a cualquiera, es fundamental el compromiso, pero no está resultando muy fácil que vengan. Tal vez alguno de ellos lea la nota; les recordamos que están invitados”.

“Cuesta mucho más que las mujeres reconozcan la adicción. Muchas veces son señaladas de reventadas, y el hombre que se droga es un canchero”

En cuanto al discurso del presidente Alberto Fernández acerca de impulsar una nueva Ley de Salud Mental, señaló: “Para mí es fundamental una nueva ley y que se pongan de acuerdo los de la derecha, el centro, la izquierda, arriba, abajo... Tenemos que entender que el mundo no es el mismo que hace quince años, sobre todo, después de la pandemia que, lamentablemente, provocó más consumo y más problemas psiquiátricos. Lo que sucede necesita un compromiso de la política, de la sociedad en su conjunto y de los medios de comunicación. Marina Charpentier es fundamental, como Estela Mauri, otra madre; ambas trabajan juntas porque son emblemas. Estela perdió un hijo, Marina casi pierde al suyo. Entonces, esas sufridas madres, como la mía también, son símbolo del dolor, pero buscan concientización”.

De cara a las presentaciones de este fin de semana de Chano en La Plata luego de estar varios días en terapia intensiva y sedado, tiene una respuesta contundente: “No opino con respecto a la familia, de la cual soy muy cercano. Nunca lo haré”.