La familia, los amigos y los ex integrantes de One Direction se reunieron este miércoles en Londres, Inglaterra, para darle el último adiós al cantante británico Liam Payne en su funeral.

A poco más de un mes después de que la estrella musical falleciera a los 31 años al caer de un hotel en Buenos Aires, se llevó a cabo un servicio este mediodía en la iglesia de Santa María en la ciudad de Amersham, al noroeste de Londres. Entre miles de rosas blancas y decenas de candelabros, sus familiares y allegados lo despidieron.

Sus excompañeros en One Direction, Harry Styles, Niall Horan, Louis Tomlinson y Zayn Malik se mostraron conmovidos, y algunos de ellos saludaron a los fanáticos que se acercaron hasta el lugar. También estuvieron presentes actores y personalidades destacadas de la música británica.

Poco después de las 13, llegó a la iglesia un carruaje tirado por caballos que transportaba el ataúd de Payne. Lo recibieron la madre quien estaba visiblemente conmocionada y su padre, el encargado de repatriar el cuerpo de su hijo tras viajar a la Argentina.

Los ex integrantes de la popular banda que nació en 2010 volvieron a encontrarse en un marco de dolor por la muerte de Payne. Algunos de ellos estaban distanciados luego de que decidieran tomar caminos separados en 2016. El funeral de su ex compañero es la primera vez que se los ve juntos.

Styles, Horan, Tomlinson y Malik respetaron el código de vestimenta negra, con lentes y trajes oscuros. A Styles y Horan se los pudo ver muy conmocionados en los minutos posteriores a la ceremonia religiosa.

También estuvo presente la novia actual del cantante, la influencer Kate Cassidy, quien llegó acompañada de Damian Hurley, el hijo de la modelo Elizabeth Hurley. Además, asistió la ex pareja de Payne y madre de su único hijo, la reconocida cantante británica Cheryl Cole.

Otra de las celebridades que se acercó a despedir a Payne fue el comediante y actor James Corden, quien mantiene una amistad con varios de los ex integrantes de One Direction.

El famoso cantante fue encontrado muerto el 16 de octubre último tras caer desde el tercer piso del Hotel Casa Sur de Buenos Aires. En el marco de la investigación por su muerte, la fiscalía imputó a tres personas por los delitos de abandono de persona seguido de muerte y por el suministro y la facilitación de estupefacientes.

Payne había hablado públicamente sobre su lucha contra las drogas y sobre cómo lo afectó la fama desde una edad temprana. El cantante murió debido a “múltiples traumatismos” y “hemorragias internas y externas” luego de la caída.

De acuerdo a los peritajes, Liam había consumido alcohol, cocaína y un antidepresivo antes de morir.