Dunamar es un pequeño poblado que está ubicado dentro del partido de Tres Arroyos y si bien es "poco conocida", limita con el conocido balneario de Claromeco. Este hermoso lugar cuenta con muchos atractivos, pero principalmente se destacan los paisajes naturales que componen una paradisiaca costa, un arroyo tranquilo y un frondoso bosque que invita a descansar en silencio. Por otro lado, esta villa esconde una espectacular oferta gastronómica para disfrutar en familia o amigos.  Más allá de las cuestiones mencionadas, también es un punto con mucha historia que vale la pena descubrir y proteger. 

Sobre la ribera del mar argentino y a unos 565 kilómetros de Capital Federal podemos encontrar este acogedor paraje. Pese a que el viaje hasta allí lleva poco más de cinco horas en vehículo, no hay dudas que es una buena experiencia para realizar sobre todo si sos un aventurero y amante de la adrenalina.  Simplemente, salir por la Riccheri y empalmar con la Autopista Ezeiza- Cañuelas. Luego, tomar la Ruta Nacional 3 hasta el kilómetro 492 donde se toma la Ruta Nacional 228 y finalmente, doblar por la Ruta Provincial 73 que conduce a la entrada de la localidad.  

Un pueblo para visitar todo el año 

Durante el verano lo que más se destaca son sus playas que son poco concurridas y tranquilas. La costa se caracterizan por ser prácticamente virgen, las arenas son claras y la contaminación sonora no existe.  En cuanto a sus aguas, son color turquesa y de temperatura templada. Asimismo, su particular ubicación geográfica la hace protagonista de bellísimos atardeceres y continuando con el ambiente natural, sus 172 vecinos se encargan de mantener cuidados cada uno de los espacios y mantienen la estética campestre que tanto caracteriza la zona. 

Uno de los puntos más pintorescos dentro de la villa turística es su frondoso bosque que posee acacias, tamariscos, pinos y eucaliptus que cambian de color con cada estación. A lo largo de las 500 hectáreas que corresponden a este espacio se pueden aprecias distintas especies autóctonas y puntos de distensión donde el turista puede disfrutar de la tranquilidad y lindos paisajes de la zona. En este circuito natural se pueden realizar desde caminatas, paseos en bicicleta, cabalgatas, pícnics al aire libre y mucho más. 

¿Qué se puede hacer en Dunamar. 

No se puede negar que las principales actividades radican en los atractivos naturales, de hecho, sus playas se aprovechan desde temprano y hasta el anochecer, ya que el sol sale y se oculta en el mar, ofreciendo un espectáculo meteorológico. Asimismo, se practican numerosos deportes acuáticos como surf, kite, kaiak. Además, fue bautizado como el paraíso de la pesca debido a sus tranquilas aguas de mar y arroyo.

Por otro lado, las dunas son el escenario ideal para tablas de sundboard, cuatriciclos y travesías en vehículos todoterreno. Para aquellos que prefieran las actividades más tranquilas, se disfrutan también las largas caminatas y cabalgatas que invitan a conocer a profundidad la magia del lugar, el canto de las aves y las pequeñas especies animales que viven en el entorno.  Si el clima no se presta para ir a la playa, en la plaza central hay variedad de actividad y juegos para los más chiquitos de la familia.

Dunamar también tiene un gran espacio campestre donde convive la playa y la llanura bonaerense, por eso se pueden distinguir espacios donde el turismo rural predomina como el paseo del arroyo que desencadena en una hermosa cascada que tiene siete caídas distintas. Por otro lado, es importante mencionar la variada y rica oferta gastronómica, donde se puede degustar platos tradicionales que son 100% caseros. Uno de los lugares más típicos es el bodegón Kuyem y para aquellos que sean fanáticos de lo dulce, no pueden dejar de visitar la confitería y pastelería, Los Polacos, que posee masas europeas. 

Por último, es importante mencionar que hay una importante oferta hotelera que se adapta al presupuesto que tengan cada uno de los turistas. Se puede decir que son varios los motivos por los cuales se puede decir que esta localidad enamora, pero la característica principal es que en un mismo sitio se combina una inmensa variada de propuestas que invitan al confort y la diversión tanto en familia como en pareja.