Escapada: el pueblo bonaerense con una gran oferta gastronómica que esconde un viejo almacén de campo
¿Sos de buen comer? Entonces no podés dejar de visitar este acogedor parador que esconde muchos atractivos, ideal para una escapada. Conocé todos los detalles del sitio, en la nota.
Fulton es una pequeña localidad rural que se esconde en medio de la provincia de Buenos Aires y pertenece al partido de Tandil. A pesar de que es un lugar "poco conocido", dentro los amantes del turismo local es muy famoso debido a que tiene una gran oferta gastronómica y es un espacio ideal para descansar en familia o amigos. Más allá de estas destacadas cuestiones, es un paraje con una historia atractiva que refleja la época dorada del ferrocarril argentino.
Ubicado a 369 kilómetros de Capital Federal y a unos 39 de la cabecera del municipio. Sin dudas es una escapada perfecta para hacer en cualquier momento del año y, además, es un paso obligado que tenés que hacer si estás por ir a visitar las sierras. El viaje hasta allí es fácil, rápido y vale completamente la pena si sos fanático de la buena comida. Simplemente, salir de la ciudad por la Ruta Nacional 1 hasta Hudson donde se toma la Ruta Provincial 2. Luego, empalmar con la 215 hasta el cruce con la Ruta Provincial 29. Conducir por dicho camino hasta el kilómetro 75 y finalmente, doblar por la 74 que conduce a la entrada del sitio.
Un pequeño resumen de la historia del pueblo
Como muchos puntos del país, Furton nació gracias a la extensión del servicio de transporte de cargas y pasajeros en la zona. La fundación se concretó en diciembre de 1914 cuando se inauguró la estación que pertenecía al ramal Tandil-Lobería de la línea del Ferrocarril General Roca. Debido a la buena ubicación de la localidad, tiempo después de la habilitación de la parada, se construyeron embarcadero de ganado y los galpones para cargas cereales.
Gracias al desarrollo económico de la zona, se instalaron los primeros edificios públicos como la escuela y la biblioteca. Asimismo, muchas personas llegaron para habitar la zona y con la esperanza de mejorar sus condiciones de vida. A pesar de contar con las condiciones para convertirse en una ciudad, a fines de 1979 dejo de circular el tren de pasajeros y con la crisis de los primeros años de la década del 2000, los cargueros también fueron cancelados. Desde entonces, la población fue descendiendo y actualmente tiene 80 vecinos que se dedican principalmente a la agricultura y ganadería.
Un pueblo muy pintoresco
A pesar de ser pequeño y poco conocido, los vecinos invirtieron para hacer de Fulton un circuito turístico que tenga como base el campo. Principalmente, se destaca la excelente gastronomía que se sirve en el Almacén de Adela. Este comercio de ramos generales logró hacerse conocido gracias a la recomendación de decenas de personas y hoy muchos visitantes llegan con el fin de probar las pastas caceras y la exquisita tortilla de papas que aseguran que es la mejor de la provincia de Buenos Aires. Asimismo, ofrece variedad de postres y cosas ricas para la merienda.
Continuando con el recorrido, no se puede dejar de visitar el emprendimiento gastronómico que se encuentra en la vieja estación de trenes que invita a degustar ricos dulces hechos con mucho amor y conocer más acerca de la historia del sitio. También vale la pena destacar la fábrica de conservas y alfajores Estaful, donde se puede probar los productos regionales acompañados de un rico café.