Sin dudas, para quienes estén buscando descansar junto a su familia en algún destino cordobés, Villa del Totoral es la opción ideal. Se trata de un pintoresco pueblo, ubicado al norte de Córdoba, que está lleno de historia y tradición.

Entre sus principales atracciones, se encuentran las antiguas casonas, que se pueden recorrer, y un río cristalino para refrescarse. Además, es el destino perfecto para descansar y disfrutar de la naturaleza.

Villa del Totoral se encuentra ubicado a 80 kilómetros de la Ciudad de Córdoba por la Ruta Nacional 9, y tiene un sinfín de atractivos que no te podés perder. Para estas vacaciones de verano, es el destino ideal para descansar en familia.

Un destino para visitar en familia.
Un destino para visitar en familia.

Qué visitar en Villa del Totoral

El pueblo cordobés se destaca del resto principalmente por su historia y tradición, ya que formaba parte del antiguo Camino Real al Alto Perú. Además, esta pequeña localidad fue lugar de paso de la expedición fundadora de la ciudad de Córdoba.

Una de las principales atracciones de Villa del Totoral son sus 25 casonas, las cuales fueron construidas entre los siglos XVIII y comienzos del XX. La gran mayoría de ellas, anteriormente fueron residencias de grandes personalidades, tales como Pablo Neruda, Arturo M. Bas y Deodoro Roca.

Por supuesto, todas estas antiguas casonas se pueden recorrer a través de los varios tours de la localidad. Asimismo, otra de las paradas que no te pedés es la visita a la tradicional iglesia Nuestra Señora del Rosario. Por otro lado, el museo de Octavio Pinto también es una visita imperdible al visitar la localidad.

Además, también se pueden recorrer los antiguos morteros de piedra, que son testimonio de cuando los comechingones habitaban el lugar. La historia está presente en cada uno de los lugares típicos de este increíble pueblo cordobés.

Para los que prefieran descansar en vez de recorrer, Villa del Totoral invita a disfrutar de su río cristalino, ya que los turistas tienen permitido refrescarse allí. Para ello, uno de los lugares favoritos es el balneario Cajón de Piedra. Se trata de una pileta natural, que está formada por la caída de varias cascadas.

El río cristalino del pueblo es uno de sus principales atractivos.
El río cristalino del pueblo es uno de sus principales atractivos.

Otra gran opción para los amantes del trekking es la caminata al cerro de la Cruz, la cual se puede hacer en unas pocas horas. Asimismo, quienes no sean tan fanáticos de este deporte, pueden realizar paseos en bici o cabalgatas por los paisajes más lindos del lugar.

Este pintoresco destino es uno de los más elegidos para  disfrutar en familia. Tanto en las vacaciones como en los fines de semanas, muchos aprovechan para hacer un asadito y descansar en las orillas del río homónimo.