Comenzaron las esperadas vacaciones de invierno, un periodo de reencuentro familiar que se presta como un momento perfecto para encarar algún pequeño viaje por alguna provincia de Argentina o, simplemente, realizar una escapada de pocas horas por los maravillosos pueblos "escondido" a lo largo de la provincia de Buenos Aires. 

Teniendo en cuenta que el frío aún continúa siendo un punto de consideración por parte de los turistas locales, en esta oportunidad, queremos presentar un destino soñado que no solo reúne variedad de actividades culturales y rincones naturales para disfrutar del aire puro, sino que también ofrece una estadía llena de confort en sus espectaculares aguas termales. 

Una localidad cerca de CABA para disfrutar las vacaciones de invierno

General Belgrano es una pequeña ciudad que está ubicada tan solo 177 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, es decir, poco más de dos horas de viaje en vehículo. A pesar de esta enorme cercanía con las principales urbes del AMBA, se destaca que aún mantiene su estética rural e inmensa tranquilidad, la cual la convierte en un destino ideal para descansar. 

Para llegar a esta localidad bonaerense en auto hay que tomar la Ruta Nacional 1 hasta Hudson, punto donde se empalma con Ruta Provincial 2. A la altura del Puente Echeverry, doblar por la Ruta Provincial 215 en sentido a Coronel Brandsen. Finalmente, continuar por la Ruta Provincial 29 hasta llegar al punto deseado. Tené en cuenta que hay distintos caminos que te conducen hasta allí, por lo que es fundamental que chequees cuál te queda mejor teniendo en cuenta tu hogar. 

En este sentido, también vale la pena mencionar que se encuentra en la cercanía de pueblitos turísticos "poco conocidos" que son sumamente atractivos e incluso ofrecen variedad de alternativas de actividades, como es el caso de Castelli, Lezama, Pila, San Miguel del Monte, Abbot, entre muchos otros. 

Un destino para desconectar de la rutina

Si bien la popularidad de General Belgrano es relativamente reciente, podemos comentar que una de sus principales peculiaridades es que se encuentra construido sobre el río Salado, por lo que se destaca por contar con una bonita costanera que cuenta con dos balnearios y variedad de actividades recreativas que se unen o relacionan con este sereno curso de agua natural. 

A pocos minutos del casco histórico de la localidad, se desarrolla el complejo turístico y curativo: Termas del Salado, un predio que posee más de 46 mil metros cuadrados en los que se puede disfrutar de diversos atractivos que invitan, principalmente, a descansar y desconectar de todo el estrés de la ciudad. Asimismo, durante las vacaciones de invierno, se recomienda como un destino para huir del frío, dado que sus aguas se encuentran con temperaturas cálidas. 

En el recinto, encontrarás piletas con aguas cristalinas que brotan de las profundidades del río y que cuentan con variedad de beneficios para la salud de las personas. Para potenciar el relax, ofrecen área de Spa, él cuál brinda tratamientos de belleza, bienestar corporal y mental  a los turistas; Aquellos que viajes con chicos pequeños, podrán aprovechar los "Espacio para niños" que cuenta con amplios sectores verdes con juegos, quinchos, mesas y sillas, para que pueda relajarse completamente.

Una opción para todos los bolsillos

A lo largo de General Belgrano hay estancias, casa de campo, fincas y hoteles que se presentan como una excelente opción, sobre todo si tu deseo es descansar de la rutina y también desconectar de la tecnología que nos agobia gran parte de las jornadas. Más allá de ofrecer todo lo necesario para una estadía confortante, muchos de estos lugares tienen incorporadas alternativas turísticas como paseos, tours gastronómicos, visita de animales, safaris fotográficos y mucho más. 

Si deseas hacer una escapada más austera, el camping municipal ofrece la posibilidad de acampar en un hermoso rincón verde que está adaptado con parrillas, espacios de deportes y opciones gastronómicas de todo tipo. Por otro lado, aquí se puede practicar pesca de  especies como pejerreyes, carpas, entre otras.

Por último, vale la pena visitar el Bosque Encantado, una reserva natural creada al rededor de una vieja estancia y cuenta con senderos naturales y vegetación completamente admirable para disfrutar de un día distinto. Asimismo, entre los árboles, se puede apreciar distintas historias mitológicas sobre hadas, duendes e incluso monstruos.