Es argentino, vive en España y se gana la vida viviendo en casas ajenas: "La paso muy bien, no hago casi nada"
Una nueva tendencia de viaje económico toma fuerza entre los turistas argentinos. Se trata de no pagar alojamiento, trabajar remoto y pasar el día con mascotas. Conocé cómo hacerlo en la nota.
A pesar de estar cómodo en Argentina, Juan llevaba años con el deseo de viajar hacia el exterior. Cuando finalmente aterrizó en España en 2021, su idea era subsistir con un emprendimiento de productos naturales para mascotas, pero pronto encontró una profesión alternativa que cada vez toma más fuerza entre los inmigrantes argentinos: el house sitting.
La tendencia del house sitting funciona como un sistema de intercambio: por un lado, está el cliente que planea irse de viaje por un tiempo extendido y no quiere dejar su propiedad y/o sus mascotas solas, pero tampoco quiere llevarlas y forzar a cambiar su rutina. Por el otro lado, están los housesitters, quienes ofrecen ceder parte de su tiempo para cuidar la casa a cambio de alojamiento.
"Acá en España hay una movida de alimentos disecados como oreja de cerdo y tráquea de vaca. A raíz de eso se me ocurrió armar un TikTok para subir videos sobre la temática y detecté que hay varios clientes –entre ellos españoles e ingleses- que viajan mucho y no saben con quién dejar su mascota", comentó Juan a La Nación.
En esa misma línea, fundamentó su decisión, que hoy en día le permite sacar un rédito económico suficiente para poder vivir en España y ejercer su oficio en Marbella, una de las partes más codiciadas en la orilla del Mediterráneo: "Por esta zona hay un problema de usurpación importante, es por eso que me fui adentrando en círculos de gente conocida en los barrios y ahí empecé a tener mis primeros clientes", agregó.
Con ayuda de las redes sociales y el boca a boca, el argentino logró construir una clientela sostenida: hoy por hoy, gana 60 euros por cada día que pasa en una casa ajena, además de los costos de viaje que pueda necesitar. "A mí me sirve mucho y además durante el resto del día no tengo que hacer prácticamente nada. Atiendo algunos negocios que tengo online, estudio, me divierto, miro películas, la paso muy bien", detalló desde su cuenta de TikTok.
Y mientras Marsella es donde conduce la mayoría de su negocio, Juan también sabe aprovechar el house sitting para viajar: Actualmente, mediante mensajes en su cuenta de TikTok, recibe propuestas para continuar con su trabajo en Barcelona, Madrid y en otros países como Estonia y Alemania. Y no es el único.
Viajar con house sitting: recorrieron más de 60 países cuidando casas
El house sitting todavía es una tendencia en desarrollo en Latinoamérica, pero ya se encuentra bien afianzada en Europa y países como Estados Unidos e India. Con tantos destinos repletos de potenciales clientes, no es extraño que los viajeros más experimentados elijan el nuevo modelo de negocios para alivianar los gastos en sus travesías.
Este es el caso de Antonela Brianese y Matías del Zotto, una pareja de argentinos que ya recorrieron más de 60 países con la modalidad de house sitting. La pareja de autodenominados "nómadas del turismo sostenible" no aceptan pagos por sus servicios, en su lugar aprovechando los hogares de sus clientes para visitar ciudades hermosas sin tener que renunciar a las comodidades de un hogar.
"Este sistema de vivir en casas nos permite seguir con nuestra vida diaria, con la 'rutina' de trabajar, entrenar, estudiar, pero viajando, mientras estamos en movimiento con una vida itinerante alrededor del mundo", escriben los freelancers en su "Guía gratuita de house sitting", donde ofrecen información vital para cualquier viajero que busque incursionar en esta innovadora tendencia.
Entre otros recursos, la pareja recuerda a los interesados que, debido a que house sitting no es una profesión oficialmente reconocida, necesitarán una visa turística para entrar en el país al que deseen visitar. "Al momento de elegir una casa previamente deben chequear los requisitos para entrar al país, según su nacionalidad y los tiempos de estancia permitidos. No se comprometan con los dueños en vano, mucho menos abandonen una casa antes de la fecha acordada", recomiendan.
Cómo empezar en house sitting
Quienes deseen dar sus primeros pasos en el mundo del house sitting pueden hacerlo con la ayuda de las varias plataformas digitales que ya existen para el intercambio de cuidadores de casa. Como un Airbnb, pero de house sitting, estas páginas web permiten a cuidadores encontrar clientes en diferentes países y ofrecen asistencia a la hora de preparar el papeleo necesario.
Hay varios sitios webs que ofrecen este tipo de intercambios, algunas que son a nivel mundial y otras por países. Sin embargo, todas funcionan más o menos de la misma manera. Hay que ingresar a los sitios web y hacer un registro exhaustivo. Una opción es Trusted Housesitters a donde se deberán registrar varios datos de la persona que ofrece sus servicios de cuidado.
Una vez registrada la persona, puede empezar con la búsqueda de la casa por país. Luego, hay que aplicar y esperar la respuesta. A este paso le seguirá seguramente una entrevista por videoconferencia y, finalmente, la aceptación o no del propietario.