La muerte de Gerardo Rozín continúa sacudiendo al mundo periodístico y, por supuesto, a todos sus seres queridos y personas que lo conocieron, quienes en gran parte estuvieron presentes en la despedida de sus restos, en un velatorio del barrio porteño de Almagro.

Julio Bárbaro, político y ex suegro del periodista, contó como fueron los últimos días de Rozín antes de su fallecimiento y cuál fue el doloroso motivo por el que su nieta de 11 años Elena no pudo ir a despedir los restos de su padre.

"Esencialmente lo sufrimos en Elena, que tiene 11 años y que la semana pasada nos dijo: ‘soy muy chiquita para estar viviendo esto’”, afrimó Bárbaro, quien además agregó que la hija del conductor fue con su madre Carmela Bárbaro a ver a su padre a despedirlo, pero ya no estaba conciente, momento en que asumió "la gravedad".

Tras la muerte de Rozín, la familia entera puso foco en los hijos del periodista, Pedro (21) y Elena, aunque más aún en su hija, por la edad que tiene y la manera en que puede enfrentar esta situación.

"Carmela le dijo de ir al velatorio y le dijo que prefería no ir, no quiso. No hace tanto Gerardo la llevó a Disney, a Estados Unidos. Él era conciente de lo que iba a atravesar", señaló el político, en diálogo con Canal 9.

Por su parte, Bárbaro reveló con tristeza que Rozín preparaba una cena con sus afectos, pero su estado de salud impidió que lo pudiera concretar y los médicos indicaron que "eso era imposible, que ya la situación no permitía el diálogo".

"Me asombró hoy la repercusión. Si hay algo que tenía Gerardo era una síntesis entre el talento y la bondad de ser, fue alguien que tenía una gran inteligencia, vivía chicanenado, pero siempre con buena leche", resaltó.

Rozín murió el pasado viernes por la noche a los 51 años de edad, tras batallar durante un año contra un tumor cerebral.