Corrían los últimos años de la década del 50 cuando María Rosa Fugazot debutó como actriz de teatro y deslumbró a miles de espectadores con su asombroso carisma y enorme sonrisa. Con el paso de los años, la carrera de la mujer se fue consolidando gracias a que participó en numerosos y éxitos proyectos artísticos. Además, compartió escenario con grandes figuras del espectáculo nacional e internacional como el mismísimo Robert De Niro.  

A pesar de su vasta trayectoria arriba del escenario e incluso en la pantalla chica, la vida le fue poniendo diferentes pruebas que demostraron que era una luchadora nata. En la actualidad, la popular intérprete se volvió noticia porque asegura que su jubilación no le alcanza por lo que continúa trabajando para subsistir y comparte casa con una amiga porque no puede pagar el alquiler de una vivienda

Conocé el presente de María Rosa Fugazot.

Una familia de artistas  

Nació el 20 de diciembre de 1942 en la localidad bonaerense de Vicente López, pero vivió gran parte de su niñez en un departamento ubicado en las cercanías de la Casa Rosada y Plaza de Mayo porque sus padres, Roberto Fugazot y María Esther Gamas, eran reconocidos actores y cantantes. Además, tenía una hermana mayor llamada Diana. 

Debido al trabajo de sus progenitores, desde muy chica se acostumbró a caminar los escenarios de los teatros y vivir una rutina de gira, se rodeó de intérpretes muy importantes e incursionó en la actuación siendo a penas una infante. Pese a que demostró tener un gran talento artístico, su sueño era ser médica forense, pero su padre le insistía para que sea arquitecta y el destino la llevo a seguir la pasión familiar. 

Siendo aún una nena, vivió un momento muy complejo cuando fue víctima de diferentes lesiones a raíz de la explosión de una bomba, la cual estaba instalada a solo 100 metros de donde estaban ella esperando el colectivo en plena Ciudad de Buenos Aires. Luego de correr hasta su casa, se enteró de que la Fuerza Aérea Argentina estaban tratando de derrocar al presidente Juan Domingo Perón. 

María Rosa junto con su madre en una temporada de verano en Mar del Plata.

Una joven promesa de la actuación 

Su comienzo como actriz fueron en el musical de tango llamado "Francisco Canaro", en él cuál su mamá era parte del elenco estable de artistas y, de pasar tanto tiempo que paso en el teatro, se aprendió el libreto. Sin que lo supiera su padre, quien no quería que estuviera en un trabajo de ese estilo, se presentó con solo 15 años arriba del escenario y la rompió. 

Los primeros años de la profesión no fueron para nada fáciles, ya que las demás actrices le "hicieron pagar derecho de piso" porque le resaltaban que había llegado por ser hija de un famoso y no por su talento. En este contexto, cuando tenía 17, las bailarinas le pusieron pedazos de vidrio en el maquillaje que usaba, la empujaron en reiteradas oportunidades y decían comentarios horribles

Pese a esos eventos, Fugazot siguió trabajando y logró destacarse dentro del ambiente. Para 1967, se unió al elenco de "Operación Ja-Já", producido por los hermanos Hugo y Gerardo Sofovich. Asimismo, protagonizo distintos proyectos con Alberto Olmedo, Jorge Porcel, Susana Giménez, Julio de Grazia, y hasta se hizo conocida como "La princesa de Bebán", gracias al gran cariño que se tenían entre ambos. 

María Rosa Fugazot en "La Cenicienta". 

Un difícil presente  

Desde que inicio su carrera en 1959 hasta hoy en día, no ha dejado de trabajar. En sus más de 6 décadas como actriz, ha sido parte de éxitos tanto teatrales como cines y televisivos entre los que se pueden destacar programas como "La peluquería de don Mateo",  "Durmiendo con mi jefe", "Los Roldán", "Culpables", entre muchos otros. 

La actualidad de Fugazot no es como se esperaba, ya que, según contó la actriz en distintas entrevistas, se ve imposibilitada de dejar de trabajar porque con la jubilación que recibe no le alcanza para pagar todo, de hecho, recientemente aseguró que vive al día. “Yo nunca me quedé con la jubilación, si hubiera tenido que vivir de mi jubilación, me suicido”, sostuvo la actriz. 

En este sentido, también confesó que se mudó a la casa de una amiga porque no puede pagar el alquiler. "Agradezco a dios estar de pie, poder trabajar y que pese a todo floto y no tengo que mendigar, porque cada vez hay más gente en la calle. Es muy doloroso lo que pasa, deprimente", aseveró la querida figura en una entrevista reciente con La Nación. 

Fugazot continúa trabajando porque no le alcanza la jubilación.