El día en que la temperatura llegó a 43,3° y murieron 11 personas en la Ciudad de Buenos Aires por insolación
Los porteños, como en gran parte del país, padecen una ola de calor agobiante. Si bien la máxima pronosticada es de 42 grados, no se descarta que la tempatura sea mayor y quiebre la marca histórica alcanzada el 29 de enero de 1957, cuando llegó al récord de 43,3.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) pronosticó una temperatura máxima para este viernes de de 42 grados en la Ciudad de Buenos Aires, muy cerca del récord histórico registrado en la Capital Federal el 29 de enero de 1957, cuando alcanzó los 43,3.
El martes último en el territorio porteño el termómetro indicó 41,1 grados, a las 16.05. Se trató de la segunda marca más alta desde 1906. Como el agobio se da en medio de una tremenda ola de calor, hay temor de que la estimación del organismo falle y este viernes se quiebre el récord.
Las crónicas de la época reflejan que el histórico 29 de enero de 1957 la Ciudad de Buenos Aires fue un infierno. “En cien años no se había anotado la marca de ayer: 43,3°”, tituló el diario La Nación al día siguiente.
Por su parte, Clarín describió desde su tapa la situación de la jornada anterior así: "Desde las horas de la mañana fue posible prever que se tendría un día de bochorno. A las 9, la temperatura, en vertiginoso ascenso, llegaba a los 33,6° y, dos horas más tarde, sobrepasaba los 38 grados”.
El récord llegó recién a las 15, con los 43,3 grados que rigen desde entonces como marca absoluta.
Por entonces, los porteños tenían más posibilidades de refrescarse en las distintas playas municipales de la Ciudad de Buens Aires en las costas del Río de la Plata, en la actualidad cerradas por la contaminación.
Además, no contaban con las enormes construcciones edilicias, que no permiten que corra la brisa libremente .
Sin embargo, la ola de calor causó aquel 29 de enero la muerte de 11 personas por insolación, mientras que otras 100 tuvieron que ser atendidas en hospitales como consecuencia de la temperatura extrema, según las crónicas de la época.