Marcos Ginocchio es el favorito del público en esta nueva edición de Gran Hermano. El salteño se ganó el cariño de la gente con su belleza y su forma de ser. ¿Lo más llamativo de esto?, logró conseguir seguidores fuera del reality sin protagonizar escándalos. 

Perfil bajo y de pocas palabras. El joven, que es campeón de Jiu Jitsu, jamás pegó un grito dentro de la casa, ni fue la cara de un problema, sino que siempre está en el momento corrector para traer paz y calmar las aguas, porque siempre que interviene es de manera positiva y con amor.

En esta oportunidad, fue la noche de Navidad la que lo volvió a dejar muy bien parado frente a los miles de televidentes de que lo apoyan sin importar nada. 

Es sabido que las fiestas de fin de año son muy esperadas por muchas personas, pero a otras no les agrada mucho, ya que les invade la nostalgia. En el contexto de estar encerrados en una casa hace más de dos meses con personas que uno apenas conoce, puede hacer que estos momentos se vuelvan aún más duros.

A raíz de esto, las emociones que se vivieron ayer en la casa más famosa del país fueron variadas. Algunos bailaban al ritmo de la música, otros bebían alcohol y algunos disfrutaban de la comida. Otros, como Alfa o Romina, estaban angustiados debido a que extrañaban a sus hijos.

No obstante, hubo una escena en la que todos se mostraron muy unidos y en la misma sintonía. Este momento se dio mientras todos estaban reunidos en el living, fue allí cuando Marcos tomó la palabra y dio un breve discurso en el que lo dijo todo.

El joven comenzó diciendo: “Pase lo que pase, estemos mucho tiempo, estemos poco tiempo, creo que esta experiencia nos va a ayudar muchísimo, pero para todo. Creo que es algo hermoso que nos enseña la vida y el día a día nos vamos acostumbrando a cosas que no veníamos, ni teníamos planeado hacer”.

“Creo que de todos aprendemos algo, de todos: de las cosas buenas, de las cosas malas, de los errores, vemos los sentimientos que tenemos guardados, las cosas buenas de los demás. Creo que vamos a salir de acá con una fortaleza mental enorme, que nos va a ayudar para un montón de cosas que no teníamos planeadas”, terminó su reflexión.

Como era de esperar, los usuarios de las redes sociales quedaron enamorados del discurso de Marcos y volvieron a confirmar que es un “buen chico”. Entre buenos comentarios hacia su persona, elogios y teorías, las personas analizaron el clip donde se lo puede escuchar hablando con el resto de los hermanitos.

Algo en lo que muchos usuarios se pusieron de acuerdo es que a través de este discurso de Navidad, Marcos reveló cuál es y cuál fue desde el principio su objetivo principal para entrar a la casa de Gran Hermano.

Algunos de los comentarios en relación con su juego

“Por fin entendí que lo motivó a entrar. Era al único que no le sacaba la ficha acerca de porque decidió participar en Gran Hermano, escribió una mujer. “No creo que haya entrado por el premio. Viene de una familia sin necesidad económica y tiene muchos  instrumentos para ganar dinero fuera de GH. Nunca trató de usar las redes para ser famoso, ni tiene perfil de persona que le guste la fama. Creo que es un desafío de superación personal”, reflexionó otra mujer. “Yo creo que justamente lo tomó como un "retiro espiritual", para seguir creciendo en empatía, paciencia, amor... ¡Aunque creo que ya más no puede crecer en esos aspectos, es un ser maravilloso!”, comentó una usuaria.