En estas vacaciones de verano, hay muchos que están buscando zonas tranquilas para aprovechar de unos días de paz y naturaleza. Para quienes buscan descansar, hay 10 opciones que resultan ideales.

Para conocer este verano, existen algunas playas secretas, que van desde Buenos Aires hasta la Patagonia. Quienes elijan alguno de estos destinos, podrán disfrutar de un soñado sol, arena, mar y, lo más importante, una tranquilidad absoluta.

A pesar de que son rincones poco promocionados, lo cierto es que sus playas son de las mejores de la costa argentina. Se trata de pequeños balnearios, casi ocultos, en las provincias de Buenos Aires, Río Negro, Chubut y Santa Cruz.

Costa Chica

Este lugar cuenta con uno de los campings más completos del Partido de la Costa, además de cabañas, bungalows, casas de alquiler, un vivero y el complejo deportivo y recreativo con piscina Punta Ballena.

Además, Costa Chica cuenta con el muy completo parque de actividades al aire libre Bosque Aventura, parte de la tríada de complejos temáticos de Las Toninas, junto a El Laberinto y Costa Salvaje.

Colonia Marina

Se trata del "secreto mejor guardado" de Villa Gesell, el cual aparece semioculto por el bosque y las dunas, en la ruta de arena hacia Mar de las Pampas, que continúa la traza de la avenida 7 más allá de la calle 152.

El acceso al silencioso remanso de Colonia Marina se desprende del camino principal en la zona de los campings Monte Bubi, Mar Dorado y Casablanca.

Centinela del Mar

Ubicado cerca de Mechongué, en el camino de Miramar a Necochea, el mar y el cielo copan la escena de la primera vista que entrega Centinela del Mar desde la cima de un acantilado.

El balneario está conformado por una capilla, la escuela Alfonsina Storni, los restos de un hotel, un vagón de tren y no más de veinte casas.

Los Ángeles

Cuenta con un impactante paisaje de dunas revestidas de verde, arena y acantilados de Los Ángeles. Los Ángeles es uno de los sitios más indicados para esperar el pique de gatuzo, pescadilla, cazón, chucho y pejerrey.

Los Pocitos

Este lugar está ubicado unos 50 kilómetros hacia el norte del polo pesquero de Bahía San Blas y a 70 kilómetros al noreste de Carmen de Patagones.

Este reservorio de ostras, conchas marinas, arena blanca y agua verde turquesa, se hizo conocido por los cinco pozones de agua dulce, los cuales fueron descubiertos en la zona en la década del '30.

Bajada de Echandí (Río Negro)

Esta playa es imposible de detectar desde el camino principal, y ofrece un tramo del mar a veces calmo y, en ocasiones, embravecido y con enormes olas, piletones de agua tibia en la restinga y abundante pesca de pejerrey.

Fuerte Argentino (Río Negro)

Durante siglos, el paisaje alternado por lagunas y pozones de aguas cálidas, arbustos espinosos poblados por aves y reptiles, afloraciones de piedra caliza, restos fósiles y caparazones de moluscos fueron las grandes apreciaciones de este lugar.

La excursión en 4x4 desde el balneario más famoso de la Patagonia es la única forma de acceder a este pequeño paraíso, en el que sobresale una barda de 150 metros de altura.

Puerto Lobos (Chubut)

Ubicada a la altura del paralelo 42° -que marca el límite entre Río Negro y Chubut- y a 22 kilómetros de la ruta 3 por la ruta 60 (de ripio), las restingas de piedra y la playa de arena con pequeñas rías, médanos y acantilados de Puerto Lobos conforman el mejor escenario para el trekking y el buceo. 

Isla Escondida (Chubut)

A esta playa se puede llegar por la ruta 1, de ripio, que recorre 50 kilómetros desde Rawson hacia el sur. Otra opción es el desvío de 40 kilómetros (la mitad está pavimentada) de la ruta 75 desde la ruta 3.

En el camino, los visitantes pueden ser sorprendidos por la presencia de maras, guanacos, piches, choiques y zorros.

La Mina (Santa Cruz)

Esta playa de un kilómetro de largo, cubierta de canto rodado y reparada por un enorme acantilado de 65 millones de años de antigüedad, está ubicada a 17 kilómetros al norte de Puerto San Julián.

La marea baja facilita la aparición de caracoles en la orilla. Además, se pueden encontrar fósiles de troncos y de fauna marina extinguida.