Del productor a la mesa: frutas y verduras se encarecen más de un 300% al llegar a los comercios barriales, pero en los mercados bajaron un 20%
El rubro de las verdulerías registra una amplia brecha de precios: en el Mercado Central hay productos que disminuyeron un 20% su valor, mientras que los productores aseguran que ellos ganan solo un 7% del costo final que paga el consumidor.
La cadena que parte desde el productor hacia la góndola de los comercios de barrio, encarece el precio de las frutas y verduras hasta superar el 300 % de su valor original. En paralelo, los mayoristas del Mercado Central bajaron un 20% los costos de esta categoría tras alcanzar un acuerdo con el ministro de Economía, Sergio Massa. Productores, vendedores y mayoristas hablaron con cronica.com.ar y explicaron por qué existe una amplia brecha de precios.
A pocos días de conocer el índice de inflación de agosto, que se estima superará las dos cifras, un relevamiento privado realizado por la consultora LCG reveló que las verduras subieron más del 11% y encabezaron los mayores aumentos (junto con la carne y los panificados) del rubro alimentos en el octavo mes del año.
El morrón, la papa, los huevos y ciertos productos estacionales están entre los que registraron mayores remarcaciones tras las PASO y la devualuación del 22% sobre el dólar oficial. Sin embargo, productores afirman que las diferencias de precios desde el campo a la mesa de los argentinos pueden escalar hasta 10 veces más del valor original.
El presidente de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén, Sebastián Hernández habló con Crónica y aseguró que “las grandes diferencias que tenemos con los lugares de venta al público como las verdulerías, con aumentos hasta del 300%, se debe a la cadena. La cadena, en realidad, termina poniendo valores totalmente injustificados".
“Desde que el productor vendió su producción hasta cuando llega a la verdulería, termina valiendo más de 10 veces más, en algunos casos, a lo que cobra el productor. Hoy tenemos una cadena muy grande, con muchos actores que terminan levantando el valor del producto muchísimo y no coincide con la realidad de lo que cobra el productor”, señaló el representante.
En este sentido, Hernández aclaró que los productores se quedan con un 7% de lo que paga un consumidor en la góndola. “No llegamos ni siquiera a un 10%. Cuando una manzana vale 1.500 pesos el productor estaría recibiendo 150 pesos por el kilo. No es así, está recibiendo menos de 100 pesos”.
El sube y baja de los precios
En lo que respecta a los productos que sufrieron más modificaciones, el productor reconoció que “el tema de morrones, papas, huevos, entre otras verduras y productos estacionales es que hay un gran problema que hace que haya variaciones y momentos en el año en que valen más algunos productos que otros por la estacionalidad”.
En este sentido detalla: “El tema de los huevos, está relacionado con la gripe aviar. Hay lugares en Argentina que han sufrido las consecuencias por la mortandad de semejante cantidad de aves de corral. El hecho de producir menos y cuando hay menos producto, los precios terminan aumentando".
Las condiciones climáticas y brotes en las granjas son factores históricos que inciden en la actividad. “Los meses de invierno siempre ha decaído (la producción) y ha caído mucho el consumo en función de la venta y el valor. Sin embargo, al consumidor le están llegando valores altísimos”, explicó Hernández.
El octavo mes del año cerró con nuevos incrementos en uno de los sectores más afectados por lainflación. Según refleja el estudio de la consultora LCG, en la cuarta semana de agosto, las frutas tuvieron una suba del 5,7%.
Acuerdo con los mayoristas
Los mayoristas del Mercado Central retrotrajeron un 20% los precios de frutas y verduras tras sumarse al Programa de Fortalecimiento de la Actividad Económica y del Ingreso, anunciado por Sergio Massa.
En el caso del tomate, se resolvió parcializar una parte de la producción y comercializarlo a 240 pesos el kilo. Mientras que la lechuga sale 140 pesos el kilo, la zanahoria 100 y el zapallo anco (que tuvo un aumento significativo antes de las PASO) quedó a 90 pesos.
“Los productores y mayoristas del Mercado Central están haciendo una baja muy importante en estos artículos”, sostuvo hace unos días el presidente de la Cámara de Operadores Frutihortícolas Mayoristas del Mercado Central de Buenos Aires, Claudio Mollo.
Por su parte, el titular de la Federación de Productores de Papa, Carlos Antúnez, remarcó que al ser un producto de consumo masivo, también se sumaron al esfuerzo de retrotraer precios. “Es 20% lo que se va a retrotraer”, aseguró el dirigente y añadió que el kilo de papa podrá conseguirse en el Mercado Central a 276 pesos. “Se trata de un cultivo que no escapa a lo sufrido por la sequía, que ha hecho mucho daño en los campos”, expresó.
Fuentes del Mercado Central informaron a este medio que las ofertas en frutas y verduras de la feria minorista se renuevan “todos los fines de semana” aunque se consiguen “buenos precios toda la semana”.
La cadena
"El minorista se abastece directamente del sector mayorista, por lo cual no tiene tanto gasto de flete ni nada, entonces el precio siempre es competitivo y tenés entre un 30 y 50 % menos en algunos productos”, detallaron desde el mercado más convocante de Buenos Aires.
Sobre las diferencias entre los valores que registran algunas verdulerías en la ciudad de Buenos Aires, desde el histórico Mercado aseguraron: “Quizás tenés un poco más de diferencia con lo que es las verdulerías de afuera, ni hablar con los supermercados”, destacaron.
Un ejemplo claro de esa diferencia de precios es el maple de huevos que de acuerdo a la oferta del Mercado Central que rige desde el 6 al 12 de septiembre se consigue a un precio de 1.700 pesos, mientras que una verdulería del barrio porteño de Villa Santa Rita lo ofrece a 2.800 pesos.
Por su parte, el titular de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén, explicó: “Dentro de los costos y de lo que paga un consumidor, el 48% se va en impuestos a nivel nacional, después los impuestos a niveles provinciales y desde ahí tenés un porcentual dependiendo de la cadena. Por ejemplo, el mercado dentro de los valores que vende, le añade al precio un 12 o un 15% más y bueno cada uno le va poniendo un porcentual para ganar”.
Hay dos situaciones, añadió Hernández: “El consumidor que paga lo que termina pagando por todos los costos internos que tienen todas las actividades y el productor que recibe lo poco que puede recibir en función de las liquidaciones que vamos teniendo, porque no tenemos una regulación donde se implique o se pongan valores determinados al producto”.